El conflicto de Salud no se resuelve y suma al de docentes

CÓRDOBA

            En Córdoba, en las últimas semanas, el conflicto de salud no se resuelve y sumó al sector docente que se organiza cada vez más desde sus bases y marca la cancha a la conducción de UEPC. Ambos conflictos tienen en común la organización de base que ha puesto en jaque a las conducciones burocráticas: en el caso de salud, al sindicato de empleados públicos y en el sector docente, a UEPC. Además, ambos conflictos han retomado las banderas de la recomposición salarial y sueldos básicos por encima de la canasta básica total. En un año electoral, la persistencia de estos reclamos ha generado que la mayor parte de los gremios que engloban a las diferentes reparticiones estatales, por presión de sus bases, no acuerden con las ofertas del gobernador Schiaretti. Esto ha trabado las negociaciones paritarias y obligado a la provincia a emitir aumentos por decreto. 

            En ese conflicto, que para salud ya lleva 6 meses y como parte del plan de lucha por mejoras salariales y condiciones laborales, la organización Salud Córdoba Unida lanzó el el 3 y 4 de abril un paro por 48 horas en los hospitales provinciales y ese martes 4, desde las 10 horas movilizaron desde el Polo Sanitario hasta Casa de Gobierno para reclamar también por los descuentos en sus salarios correspondientes a los días en que cesaron las actividades el mes pasado.

            Bajo el título, “Schiaretti no da aumentos, pero sí descuentos”, el colectivo SCU a través de un comunicado señalaron estar “indignados” con la ministra de Salud, Gabriela Barbás, respecto a la difusión de montos engañosos sobre los salarios que cobrarían los trabajadores del sector.

            Desde Salud Córdoba Unida manifestaron: “Hace pública la asignación percibida de bolsillo por un reducido grupo de profesionales que hacen guardias, no siendo en absoluto representativo del conjunto de los equipos de salud. La Salud Pública se sostiene sobre las espaldas de miles de trabajadores que intentan con su sacrificada labor suplir la desidia del Gobierno respecto a la carencia de personal, insumos, infraestructura, etc. Recibiendo eso a cambio de entregar su vida (como se vio claramente en pandemia)”, expresaron.

            Además, comentaron que los “salarios básicos no cubren la canasta básica total” y difundieron varios recibos de sueldo que así lo demostrarían.

            “El conflicto no está cerrado”, expresaron en el comunicado. “Y el Gobierno lejos de mostrar voluntad, intenta disciplinar nuestra lucha respondiendo con descuentos masivos y brutales”, consideraron.

            En sintonía, la Unión de Educadores de la Provincia de Córdoba por presión de sus bases rechazó por segunda vez la propuesta del Gobierno Provincial y convocaron un paro general. por 48 horas que se dio lugar el 22 y 23 de marzo, finalizando con una masiva marcha en Córdoba capital a pesar de la lluvia, a la que se sumó también el colectivo de Salud.

            Frente a esta movilización el gobierno mejoró la oferta para todo el sector público de un 40% en cuotas hasta junio, sólo a los educadores, subiendo ese porcentaje a 56,2% a expensas de una mejora en el ítem “Estado Docente”. Esta propuesta también fue rechazada por no cumplir con el reclamo de un básico por encima de la canasta básica y anunciaron un paro por 72 hs. La Provincia dictó la conciliación obligatoria como forma de enfriar el conflicto de cara a la presentación oficial de la campaña electoral. Esta maniobra ha generado más indignación en los trabajadores que han organizado el reclamo por fuera del gremio, visibilizándolo en los peajes de la provincia durante fin de semana largo de Semana Santa.

            A pesar de la maniobra del gobierno, ambos conflictos intentan confluir con otros espacios de estatales para conformar un gran paro provincial que destrabe la paritaria.  

DR. PABLO AGUIRRE