Sindical
Abundan las luchas del movimiento sindical y piquetero
En lo que va del año ya son alrededor de 8.000 los cortes y ese número aumenta a medida que avanza el ajuste del gobierno del FdT y el FMI. Más de 47 mil establecimientos industriales y de servicios como salud y educación componen este mapeo de los conflictos que se desarrollan principalmente en la zona del AMBA.
La crítica situación nacional en todos sus planos –económica, social y política- promueve esas legítimas protestas. La derecha de JxC Carolina Losada, Patricia Bullrich, Macri, Larreta y sus aliados “Liber-fachos” Milei y Espert proponen avanzar en reformas laborales, previsionales y aumentar el ajuste en curso.
La “marea blanca” de trabajadores de la salud viene ganando las calles por la recomposición salarial, contra la precarización laboral y en defensa de la salud pública gratuita y de calidad para los pacientes. Acaba de obtener un triunfo salarial en CABA, llevando el salario en mano de los médicos a 200.000 pesos.
La Unidad Piquetera viene llevando a cabo acciones de lucha. El 10 de noviembre realizó un “piquetazo nacional” y una movilización central al Ministerio de Desarrollo Social de Nación. Reclamaron contra los recortes aplicados por la ministra Tolosa Paz en las partidas alimentarias a los comedores populares y contra las medidas del gobierno que implican un ajuste en los programas sociales y mayor precarización laboral ante la falta de trabajo genuino.
Antes estuvo la valiosa lucha de los trabajadores del neumático que paralizaron durante varios meses la producción en reclamo de mejoras salariales. Hay conflictos de los trabajadores estatales tanto en el estado nacional como en los estados provinciales y en la Ciudad de Buenos Aires, también por mejoras salariales y contra el vaciamiento en distintas áreas del estado por medidas de ajuste pedidas por el FMI, entre otros reclamos.
Este nivel de conflictividad que se expresa en las calles muestra la gravedad de la crisis económica y política que viene atravesando la Argentina. Al mismo tiempo es notoria la falta de coordinación entre los distintos conflictos para poder golpear con más fuerza y torcerle el brazo al gobierno.
La ausencia de la burocracia sindical del CGT y de la CTA-T en estos conflictos y en la calle muestra el nivel de obsecuencia con el ajuste implementado por el cogobierno del FdT y el FMI. La CTA-T encabezada por Yasky y Baradel elige ir a la embajada yanqui a reunirse con Marc Stanley en vez de encabezar los conflictos. El propio Sec. gral de la CTA-T y diputado nacional por el FdT, Yasky quien se abstuvo de votar en contra del acuerdo con el FMI, salió a bancar el ajuste entrevistado en el programa de Romina Manguel. Al ajuste que viene aplicando Massa lo calificó como “necesario”. Necesario las pelotas.
PABLO RODRÍGUEZ