Se presentó en Feria del Libro “Mario Alberto Díaz, El otro Sindicalismo”

Un instrumento de formación      

            El 4 de Octubre se presentó el libro MARIO ALBERTO DÍAZ, EL OTRO SINDICALISMO. Participamos con mi familia compañeros de distintas organizaciones políticas y sindicales. Fue una presentación emotiva y con mucho sentimiento revolucionario. Participé abriendo la presentación y me secundaron la compañera Irina (Partido de la Liberación), Luis Bazán (dirigente actual de SIVIALCO, amigo e histórico referente de la lucha de los ’90), “Tati” Eguiguren (referente del cooperativismo – dirigente de la COOPI) y la compañera Ilda Bustos (Sec. Gral. Del Sindicato Gráfico y compañera de mi padre en los ‘80 con la Lista Verde).

            El libro contiene una recopilación de escritos de compañeros y familiares. Pero no es una mera obra de reconocimiento a mi padre, sino que coincidimos que pasa a ser un instrumento de formación político-militante-sindical, necesaria para la actualidad que vivimos y para formación de la conciencia colectiva de los compañeros.

            Es un instrumento de formación porque en el mismo confluyen las distintas experiencias de la lucha obrera y revolucionaria.

EXPERIENCIA REVOLUCIONARIA – CONCIENCIA DE CLASE

            Desde antes del retorno de la democracia, y en la clandestinidad mi padre trabajó junto a compañeros gráficos en la conformación de la lista que luego en 1986 se referenciarían en la conducción del Sindicato Gráfico, donde nace un proyecto sindical de genuina representación para los trabajadores. Es que en el tiempo de estar al frente del gremio, junto a los demás miembros de la comisión directiva y compañeros gráficos lograron la organización de las bases y la vigencia de una democracia sindical. Recorrieron toda la provincia buscando restablecer la representación por medio de la elección de delgados en todos los talleres ya que se entendía que “el Cuerpo de Delegados, como herramienta de decisión, con el respaldo de las bases gráficas, como la voz de los trabajadores, a través de un mandato irrenunciable, garantiza la democracia sindical a la que aspiramos”.

            Años más tarde, sucedieron hechos de suma relevancia para los compañeros gráficos. El gremio, en una lucha continua, logró ser firmante de convenio y manejar los fondos de la Obra Social (Obra Social propia), consiguiendo en 1993 tener la mejor escala salarial del sector gráfico del país. Como así también la adquisición de la Casa de descanso para los compañeros gráficos en San Antonio de Arredondo.

MILITANTE REVOLUCIONARIO E INTERNACIONALISTA

            “El Mario”, “el loco”, “el Chueco”,  se afianzó en los ’70 comenzando su militancia en la Juventud Guevarista del PRT-ERP, ya que con mi abuelo en una imprenta que tenían le imprimían la propaganda a los compañeros. Militó en el Partido de la Liberación en los ’80 y acompañó a cada lucha por la liberación Nacional. “Y en donde había un conflicto ahí hay que estar Negro” me decía. Y es así. Es la tarea de un revolucionario.

            Defensor incansable de las  Madres de Plaza de Mayo (tenemos el recuerdo de un pañuelo obsequiado por Hebe), participamos en la Marcha Federal en los ’90. Hizo un aporte importante en la conformación de la Corriente Sindical 1° de Mayo (organización que tuvo un papel importante en las luchas de los ’90). Fue a la URSS en los ’80, a Cuba con Fidel en 1991 y otras veces como brigadista de solidaridad, en Nicaragua, Venezuela y en donde la experiencia revolucionaria lo ameritara.

            Este libro conforma la selección especial de mi biblioteca personal, de mi herramienta de estudio, y de un instrumento de lucha.

            En mi quedó el más alto de los orgullos de mi padre, el haberme enseñado el oficio de ser gráfico; y el de ser hijo de un militante revolucionario.

¡Hasta la victoria siempre viejo querido!

MAXI DÍAZ