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Presupuesto para Educación del PRO para 2017
Presupuesto para Educación del PRO para 2017
En septiembre pasado el gobierno de Mauricio Macri envió al Congreso su proyecto de presupuesto para el año 2017. En lo que refiere a Educación se dijo desde el oficialismo que las partidas aumentarían –en el caso universitario en un 44%- con respecto a 2016. Así, el gobierno de Cambiemos busca mostrarse “genuinamente preocupado” por la Educación Pública.
ANTECEDENTES
Tal escenario parece poco creíble si tenemos en cuenta lo que han hecho Macri, Bullrich y compañía con respecto a Educación. Tan sólo un día después de la asunción de Macri, éste firmó un decreto en el cual reorganiza los ministerios y, en Educación, ponía como marco las leyes de los ’90, derogadas o modificadas en los últimos años, dejando de lado la ley 26.075 de Financiamiento Educativo. Así, se abría la puerta a reducir drásticamente el presupuesto educativo en relación al PBI (esa ley fijaba la meta de alcanzar los 6 puntos del PBI para educación). Dicho decreto, que Bullrich caracterizó como un “error” nunca fue corregido ni derogado. En mayo de este año nos encontramos también con la noticia de que la Jefatura de Gabinete desviaba fondos de Educación (unos 800 millones de pesos) a las provincias. En esos días la UBA y otras universidades decían no poder garantizar su funcionamiento a causa de los tarifazos de la luz y el gobierno nacional prometía otorgar 400 insuficientes millones.
ALGUNOS NÚMEROS
¿Por qué decimos que el presupuesto 2017 es lesivo para Educación? Si se miran los números presentados por el gobierno en el proyecto de presupuesto uno debería ponerse contento, hay más plata para educación que en otros años. En 2016 se destinó a Educación $122.819 millones de pesos. Para 2017 se preveé que sean $160.155 millones de pesos. Es un incremento importante, pero si aplicamos un ajuste por inflación y tomamos la inflación real del 42 por ciento, veremos que esos 160 millones equivalen a $114.397 millones de pesos, un 7% menos que en 2016. Así, la participación de gasto público en Educación sobre el gasto público total es de 7,4% en 2015; 7,8% en 2016; y 6,8% en 2017. A este análisis hay que sumarle otro dato. En 2016 las partidas del programa Conectar-Igualdad, la construcción de nuevas escuelas y lo que tenía que ver con Deportes no dependían del Ministerio de Educación, sino de ANSES, Planificación y Presidencia, respectivamente. Esto quiere decir que en lo programado para Educación en 2017 se han “colado” $7.200 millones del Plan Digital, $5.602 millones de la construcción de jardines y $1.408 millones de Deportes. Si restamos estos valores a lo proyectado vemos que la retracción del presupuesto Educativo con respecto a 2016 es aún mayor.
CIENCIA Y TÉCNICA
Durante el mes de octubre estudiantes, docentes, y becarios del CONICET se movilizaron en todo el país denunciando el recorte de 1.000 millones que preveía el proyecto. Macri había prometido en campaña duplicar el presupuesto de Ciencia y Técnica; más aún, la continuidad de ministro pro-Monsanto, Lino Barañao era mostrada como un guiño en ese sentido. Sin embargo, fue el mismo ministro el que demostró cual es el sentido que Cambiemos le da a la materia, cuando se quejó de que hay muchos científicos y el hecho de que no se vayan afuera estaría perjudicando al país. Gracias a las masivas movilizaciones se prometió desde el gobierno que el recorte sería menor (unos 200 millones con respecto a 2016). Sin embargo, el monto previsto sigue siendo más que insuficiente, más aún si ponemos a la inflación en la ecuación.
DEUDA PÚBLICA
Otro dato interesante que surge del análisis del presupuesto 2017 tiene que ver con el lugar que tienen los pagos de deuda en dicho presupuesto. Si lo fijado para Educación pierde un 7% con respecto a 2016, lo que tiene que ver con “deuda pública” aumenta un sorprendente 70%, pasando de 104.134 millones de pesos en 2016 a 246.629 millones de pesos. Esta es una prueba clara de cuáles son las prioridades del gobierno de Macri, que ya habían quedado en evidencia con, por ejemplo, el pago a los fondos buitres y que con este presupuesto 2017 se siguen confirmando. El macrismo le saca a Educación para pagarle a los “acreedores” (la relación deuda/educación había sido de 1,04 en 2015 -por cada peso destinado a educación, se había destinado $1,04 a deuda- y de 0,85 en 2016. La relación sería de 1,55 en 2017).
La Agrupación Estudiantil TUPAC denuncia el sentido antipopular y antieducación del Presupuesto macrista, votado en general por los aliados del PRO como Frente Renovador y Bloque Justicialista, incluidos varios kirchneristas y tres diputados del Movimiento Evita. Se pone manos a la obra para enfrentar este ajuste macrista, que le quita al pueblo para darle a los buitres y sus socios. Una universidad inclusiva, gratuita y de calidad, que garantice la permanencia de sus estudiantes es imposible con este tipo de políticas.
JUANJO GIANNOTTI