SÍGANOS EN

Liberación - Órgano de Prensa

NOTAS POLÍTICAS

Publicado

el

Malvinas desaparece rápido de la agenda importante

            La soberanía argentina sobre las islas Malvinas, Georgias y Sandwich del Sur es realmente importante para nuestro pueblo y Nación. Están ocupadas por el colonialismo británico desde 1833, salvo un breve interregno entre abril y junio de 1982 cuando fueron recuperadas por Argentina. Luego volvieron a ser ocupadas por el imperio británico que reforzó su base militar en Monte Agradable, con efectivos y todo tipo de armas, que de hecho funciona como si fuera una base militar de la OTAN, aunque en el Atlántico Sur (!).

            En las últimas semanas el tema Malvinas estuvo un rato en los medios. Después se apagó y pasó a un segundo lugar o directamente desapareció, para que debates electoralistas, muchos de ellos basura, ocuparan el top mediático. Como el PL es un partido marxista-leninista-sanmartiniano, quiere traer una vez al debate este asunto nacional.

            Primero se habló de Malvinas a raíz de un punto en la declaración de la Cumbre de la CELAC y Unión Europea, celebrada en Bruselas el 17 y 18 de julio, donde los países europeos tomaban nota de la postura latinoamericana y caribeña de la necesidad de negociaciones entre Argentina y el Reino Unido sobre la cuestión de “Malvinas-Falklands”.

            El sólo hecho de referirse a nuestras islas con las dos denominaciones (la nuestra y la british) motivó una reacción enojada de Londres, por un lado, y de los súbditos británicos o kelpers que viven en las islas. Para ellos es una propiedad inglesa y lo han refrendado con un referendo en 2013, que para Argentina no tiene valor legal.

            El incidente de julio reveló la nula disposición del gobierno inglés de avenirse a discutir el asunto de fondo, que es la soberanía. Ignoran así muchas resoluciones de Naciones Unidas que instan a esa negociación pacífica, cuando han pasado 190 años de aquella usurpación militar. Londres protestó fuerte contra aquel párrafo de la declaración de CELAC-UE pese a que luego del Brexit se retiró de la Unión Europea y no es parte de sus 27 miembros.

            El otro momento, breve, en que las islas se colaron en la agenda fue también en julio, cuando se destapó algo muy grave: desde noviembre de 2022 la Jefatura de Gabinete, por entonces a cargo de Juan Manzur, y el gobernador kirchnerista de Tierra del Fuego, Gustavo Melella, habían autorizado la instalación de un radar británico en la localidad fueguina de Tolhuin. La empresa dueña del emprendimiento es LeoLabs Argentina, con casa matriz británica y socios estadounidenses. Sus radares estaban en funcionamiento con posibilidad de monitorear todo, a 670 kilómetros de las Malvinas.

            Lamentablemente fue un senador de Juntos por el Cambio, Pedro Daniel Blanco,  quien denunció esa situación y reclamó explicaciones al gobierno nacional y provincial. Y el 30 de junio el ministro de Defensa, Jorge Taiana, dejó sin efecto el permiso otorgado a la firma anglo-estadounidense. Como diría Diego Maradona, “se les escapó la tortuga”. Con el agravante de dejar en manos del macrismo una bandera nacional que no les pertenece en absoluto pues los amarillos son parte de la banda oligárquica proimperialista.

QUE SEAN UNA PRIORIDAD    

            Es obvio que un gobierno entregado al imperio como fue el de Mauricio Macri y un gobierno que actúa según dictados del FMI como el de Alberto Fernández, Cristina Kirchner y Sergio Massa, no tienen entre sus prioridades hacer valer la soberanía en Puerto Argentino. Nosotros del PL y muchos argentinos y argentinas, sí tenemos esa necesidad y por eso hay que ponerla en la agenda popular, democrática y antiimperialista.

            Hoy Malvinas es uno de los 17 casos que se discuten en el Comité de Descolonización de Naciones Unidas. Hay que llevarla a la Asamblea General, como hace Cuba desde 1992 con la cuestión del bloqueo yanqui, para acorralar política y mundialmente al ocupante de nuestras islas.

            Para forzar a Londres a negociar, es clave multar a sus empresas y bancos en nuestro país, incluso expropiar alguno, sancionando a los bancos HSBC y Patagonia, Shell, British Petroleum, Unilever, Metrogas, Nobleza Piccardo, Dunlop, los laboratorios Glaxo y AstraZeneca, etc.

            Último, pero no menos importante, Argentina debe democratizar y nacionalizar sus Fuerzas Armadas para educarlas con una doctrina malvinera y que tengan como hipótesis de conflicto la ansiada recuperación. Para eso hay que ir rompiendo con el Comando Sur yanqui y su “Operativo Puma” de 2019 contra Venezuela, rechazando la base militar en Neuquén, saliendo de los operativos navales Unitas y los acuerdos anunciados por Daniel Filmus con la NASA, haciendo ejercicios defensivos con ejércitos tercermundistas para aprender de nuestros aliados de Cuba y Venezuela, no comprando más armas a los yanquis que nos quieren empernar con sus aviones F16 sino a los chinos, rusos e iraníes.

            Sólo recorriendo un camino político de este tipo, antiimperialista, se podrá recuperar a la “hermanita perdida” como llamaba a Malvinas don Atahualpa Yupanqui. De lo contrario Malvinas será apenas un saludo a la bandera, formal, el 2 de abril.

Continuar leyendo

EDICIÓN DIGITAL

LINKS DE INTERÉS

Partido de la Liberación