Liberación - Órgano de Prensa
A no perder tiempo con la burocracia
El triunvirato de la Confederación General del Trabajo (CGT) y algunos otros dirigentes de la central obrera dejaron en claro por qué venimos diciendo que no se puede confiar en la burocracia sindical. El paso de aquellos por el coloquio de IDEA los dejó expuestos más cerca de los líderes empresariales que impulsan la flexibilización laboral que de entablar un plan de lucha contra la quita de derechos laborales.
Tal es el derrotero de los líderes de la CGT que Juan Carlos Schmid se vio obligado a negar un alineamiento de la cúpula sindical con el gobierno de Cambiemos y a criticar a los periodistas que los definen como “amarillos”. Esa crítica se esparce también por otros agrupamientos sindicales y por las propias bases de la CGT disconformes con su conducción.
Las elecciones generales les sirvieron de excusa para defender su actitud pasiva y conciliadora con el gobierno incluso en esta coyuntura tormentosa donde Macri y sus CEOs avanzan contra los convenios colectivos de trabajo y por la quita de derechos laborales, sociales y políticos. Seguramente pasadas las elecciones quieran seguir en esta misma tónica.
Aparecen en este marco varias líneas. Por un lado el triunvirato más algunos gremios fuertes como UPCN se muestran abiertos a flexibilizar las condiciones de trabajo en discusiones que sean convenio por convenio y sector por sector. Para esto el gobierno se toma del ejemplo de Vaca Muerta y el acuerdo con el líder petrolero y senador Pereyra. Desde nuestra óptica no queda mucho mas que marcar que esta opción es inaceptable ya que aceptaron perder derechos laborales para no perder fuentes de trabajo y terminaron perdiendo en ambos sentidos.
Al interior de la CGT también se posiciona un sector que muestra más las uñas liderado por Pablo Moyano de Camioneros. Este se muestra distante a Cambiemos, se acerca a sectores de ambas CTA y critica en forma pública a los triunviros. Más cerca de este sector está también la Corriente Federal que se incorporó con varios candidatos en las listas de unidad Ciudadana.
Por último están los grupos de la CGT que directamente se plantean como aliados o parte de Cambiemos y operan a favor del gobierno y la flexibilización laboral, previsional y demás pérdidas de derechos. Con estos últimos el PL y las ABC no queremos saber más nada que combatirlos. Con los primeros tendremos unidad en acción si es que en algún momento deciden defender a sus afiliados. En cambio con el sector de Moyano y de la Corriente Federal sí se puede avanzar en un marco de mayor unidad.
El PL y las ABC creemos que no se puede seguir con dubitaciones que ponen en riesgo el futuro de nuestra Patria, nuestra Clase y nuestro Pueblo. Es necesario enfrentar en las calles, fábricas y cada lugar de trabajo las políticas de hambre, ajuste, entrega y represión de este gobierno. La vanguardia son los trabajadores y bienvenidos todos los sectores gremiales, sociales y políticos que se definen en este sentido.
No se debe esperar una unidad entre sectores gremiales que siguen dudando o que directamente pactan con el gobierno. No pactamos ni ponemos en duda pactar. Proponemos un camino de lucha, con un plan y un programa, con organización, con alianzas, con definición de tácticas y estrategias que nos permitan ir posicionándonos como clase obrera, como pueblo y como patriotas que somos frente a este gobierno cipayo.
Por eso volvemos a poner sobre la mesa nuestras propuestas y nuestra voluntad de unificar criterios con las CTA, la Corriente Federal, las regionales y gremios de la CGT que están de acuerdo en defender sus convenios colectivos, con las organizaciones sociales que siguen luchando y ganado la calle, con los sectores populares que son golpeados por esta política y con las organizaciones política que entiendan que no podemos seguir perdiendo tiempo y que hay que poner en pie una amplia Coordinadora de Gremios y Organizaciones Populares en Lucha contra Macri y su gobierno.