SÍGANOS EN

Sindical

FABRICACIONES MILITARES

Publicado

el

ATE denuncia que EEUU quiere la empresa estatal de defensa

            La Asociación de Trabajadores del Estado (ATE) alertó sobre el inminente ingreso de capitales extranjeros de origen estadounidenses y checos en la empresa estatal y mantiene el estado de alerta y movilización ante los recientes anuncios de la conducción de la empresa de Río Tercero, la misma planta que voló por los aires en los 90′. En esa sede del gremio, los representantes gremiales habrían sido notificados del cambio por parte de las autoridades de la compañía.

            A pesar de que la compañía había sido excluida de la lista de privatizaciones de la Ley Bases que el Gobierno Nacional logró aprobar en el Congreso en junio pasado, ahora pondría a la venta este sector productivo, amparándose en el “Mega DNU 70/2023” que elimina el régimen de sociedades del Estado.

            El sindicato ATE señaló que la compañía estatal Fabricaciones Militares va a sufrir una nueva reestructuración de capitales con el ingreso de participantes extranjeros en la división metalmecánica. La compañía estatal cerró el ciclo de retiros voluntarios y recorte de personal, al que se acogieron unos 240 empleados de los más de 1.400 a nivel nacional.

            El gremio señala que tras mutar a Sociedad Anónima, ingresarían a la planta estatal capitales privados conformado una empresa de capitales mixtos. En principio, las entidades que tomarían control de la división señalada serían de origen estadounidense, con especial interés en las municiones.

            Ya está decidido en el Gobierno nacional que la empresa estatal deje la figura de Sociedad del Estado (SE) y mute a Sociedad Anónima (SA), con el Estado como accionista central.

            La incorporación de empresas privadas extranjeras también se podría concretar en algunas otras plantas. Hay fábricas militares en Villa María (Córdoba), Jáchal (San Juan), Fray Luis Beltrán (Santa Fe) y Azul (Buenos Aires).

            El interés de estos capitales se encontraría en el rubro de las municiones de guerra.

            En Río Tercero se produjeron durante décadas las carcasas de los proyectiles de cañones de combate. También se hacía en esa planta la carga de esas municiones con pólvoras y trotyl. En principio, los datos que maneja el gremio es que se podría producir la parte metalúrgica, pero no ya el resto del proceso.

            Fue precisamente la Planta de Carga de Explosivos la que en noviembre de 1995 explotó, en una trágica jornada para la ciudad. La Justicia determinó que fue por un hecho intencional y provocado para ocultar maniobras de exportaciones ilegales de armamento entre 1991 y 1995 a Ecuador y Croacia, o sea en pleno menemismo.

            “Fabricaciones Militares de nuestra provincia corren el riesgo de ser convertidas en Sociedades Anónimas, paso previo a su privatización”. Así lo advirtió el secretario general de ATE Córdoba, Federico Giuliani, quien denunció que esta medida, facilitada por el DNU 70, permitirá que capitales extranjeros, específicamente de la República Checa y Estados Unidos, se adueñen de una pieza clave en la defensa y soberanía nacional.

            “Milei planteó claramente que Argentina tiene que ser el patio trasero de Estados Unidos”, afirmó Giuliani. Este dirigente subrayó que la visita de funcionarios del Departamento de Estado de EE.UU. a la planta de Río Tercero evidencia el interés internacional en estos activos, que podrían ser utilizados para la producción de municiones destinadas a la guerra en Ucrania contra Rusia.

            En particular, la planta de Río Tercero ha despertado un gran interés debido a su capacidad para producir municiones de 150 milímetros, utilizadas por la OTAN en aquel conflicto. La reactivación de esta producción podría tener graves consecuencias, no solo en términos de pérdida de soberanía, sino también en la alineación de Argentina con un conflicto bélico internacional a la vez que también pérdida de miles de puestos de trabajo.

            ATE Córdoba continuará denunciando y resistiendo estos avances privatizadores y extranjerizantes que amenazan con desmantelar sectores estratégicos del país. La privatización de Fabricaciones Militares, junto con la presión internacional y el alineamiento del gobierno con Estados Unidos y la OTAN, podría tener consecuencias devastadoras para la soberanía argentina, la defensa, la industria y el empleo público.

PABLO AGUIRRE

Continuar leyendo
Click para comentar

Deje un comentario

Tu dirección de correo electrónico no será publicada.

2 × five =

EDICIÓN DIGITAL

LINKS DE INTERÉS

Partido de la Liberación