Macri escrachado en Panamá Papers

El 3  de abril se conoció públicamente la filtración de más de 11 millones de documentos vinculados al bufete Mossak-Fonseca, en lo que se conoce como los “Panamá Papers”. La información está vinculada con la creación de empresas “offshore” en paraísos fiscales.

Los medios internacionales destacaron que entre los personajes vinculados a este tipo de empresas figuran “líderes del mundo”, incluyendo al presidente argentino.

La información surgió del trabajo del Consorcio Internacional de Periodistas de Investigación (ICIJ por sus siglas en inglés), de la que participan periodistas de Clarín y La Nación por la Argentina. En su sitio Web, el ICIJ consigna que los Panamá Papers consisten en “una investigación global sobre la creciente industria secreta del offshore, que los ricos y poderosos del mundo usan para ocultar bienes y esquivar leyes mediante la conformación de compañías pantalla en jurisdicciones remotas”.

Los papeles revelaron que Macri era director y vicepresidente de una compañía denominada “Fleg Trading LTD”, radicada en el paraíso fiscal de las islas Bahamas y que había funcionado entre 1998 y 2008 cuando el ex presidente de Boca ya era Jefe de Gobierno porteño. Al difundirse la noticia, Macri afirmó que sólo se había desempeñado en esa empresa “ocasionalmente”, que no tenía acciones ni había percibido dividendos. La prensa obsecuente inmediatamente tituló que el presidente “aclaró” su situación, al tiempo que la titular de la oficina anticorrupción Laura Alonso desestimó realizar cualquier investigación para agregar que “constituir una empresa en un paraíso fiscal no es delito en sí mismo”.

Poco después de estas revelaciones, se conoció que Macri era también director y vicepresidente de Kagemusha S.A., firma radicada en Panamá desde 1981 y que -a diferencia de Fleg Trading- se encuentra activa.

Periodistas y funcionarios insisten en que no constituye un delito la creación de este tipo de empresas; Scioli y Urtubey también expresaron su solidaridad de clase para con Macri. El gobernador salteño afirmó que cualquier persona que tenga actividades económicas fuera del país buscará los lugares donde pague menos impuestos; el ex candidato presidencial del FPV, en tanto, se limitó a declarar que creía en la explicación del mandatario.

Todos estos defensores de Macri eluden considerar las intenciones por las cuales alguien puede generar empresas pantalla en paraísos fiscales.

Otros funcionarios y allegados al gobierno han aparecido vinculados con empresas offshore; en particular, el intendente de Lanús Néstor Grindetti manejaba una cuenta en Suiza y una compañía en Panamá cuando era Secretario de Hacienda del gobierno porteño cuando Macri era Jefe de gobierno de la Ciudad. También Jorge Macri, Darío Lopérfido, Nicolás Caputo y Daniel Angelici participan de compañías radicadas en paraísos fiscales.

Panamá, Bahamas, Islas Vírgenes, Liechtenstein, entre muchos otros lugares, brindan a los ricos y poderosos un ámbito donde crear empresas en las que les aseguran la confidencialidad, la protección del patrimonio y la privacidad. Pero hay que decir que también estados norteamericanos como Nevada y Delaware, también son “paraísos fiscales”. Y que muchas veces ese dinero negro está en plazas “serias” como Suiza. La investigación de la ICIJ justamente se orienta a detectar operaciones non sanctas del capital financiero, incluyendo evasión impositiva y lavado de dinero. Muchos especialistas coincidieron en que las empresas offshore tienen esas actividades ilegales como objetivo principal.

La actitud del gobierno y de sectores que se posicionan como “opositores” muestra que hay pocas diferencias en cuestiones cruciales; lo demuestran el voto a favor del acuerdo con los “Fondos Buitres” y la complacencia ante la participación en empresas dudosas. Ante una denuncia del diputado del FPV, Norman Darío Martínez, se abrió una causa contra Macri en el juzgado de Sebastián Casanello, y el fiscal Federico Delgado pidió la imputación del presidente. Ojalá que esta causa no se demore porque todo indica que Macri presumía de una transparencia bien opaca y off-shore, como el inglés David Cameron, el presidente de Ucrania, el premier de Islandia y el rey de Arabia, entre otros.

JORGE RAMÍREZ