Vidas y Luchas de VC - Tomo 1
6. La lucha contra la represión
La memoria en todas sus formas es importante como denuncia de los represores y recordación histórica de los camaradas. Pero la más vital y cercana a sus vidas y luchas, es la que levanta sus banderas políticas y militantes, haciendo escuchar sus voces y proyectos de liberación y la conducta que sostuvieron como comunistas. Esta es la memoria imprescindible.
La incorporación de los militantes de Vanguardia Comunista (VC) a la lucha popular que es castigada con la represión, se ubica en la década de los sesenta, en los años previos a su fundación del 5-04-1965. En esa época trabajando junto con el peronismo de la resistencia cuando todavía era el Partido Socialista de Vanguardia (PSAV) sufrió la persecución por parte de la Brigada San Martín de la Policía de la Provincia de Buenos Aires. Precisamente esta dependencia policial, la maldita “Bonaerense”, en el año 1962 durante el Gobierno de Guido, será la responsable del secuestro y tortura de Felipe Vallese y de su entorno familiar y de amistades. Gracias a la complicidad del sistema judicial y de la burocracia sindical de Vandor, terminaron haciendo desaparecer al primero. (1).
Desde sus comienzos, VC consideró que la forma en que debían honrarse los caídos del pueblo como fue Felipe Vallese tenía que ser de homenaje y de lucha al mismo tiempo. Se diferenció así de los actos simbólicos sin contenido ni movilización popular que practica generalmente la burocracia sindical que es cómplice muchas veces de estos crímenes, como de aquellos otros de índole progresista que no estaban bien pegados a la lucha popular, como fue el caso de los que realizaba la Liga Argentina por los Derechos del Hombre (LADH). Esta concepción se mantiene hasta la actualidad, ya que nunca se ha dejado de lado levantar el ejemplo y los ideales de los caídos del Partido y del campo popular. (2)
En esos años del sesenta, se manifiesta la actitud solidaria cuando la represión hizo mella en otras organizaciones, como fuera en primer lugar el foco guerrillero de Salta liderado por el Comandante Segundo -el periodista Jorge R. Masetti- y a consecuencia de lo cual durante el año 1964 fueron duramente torturados los sobrevivientes detenidos en esa experiencia. Estos episodios que siempre fueron difíciles de digerir para la izquierda tradicional, encontró la respuesta amistosa en sus sectores revolucionarios, entre otros VC, sin dejar de señalarse las diferencias con la estrategia elegida por estos compañeros. (3) Este criterio solidario denunciando al enemigo de clase en primer lugar, y señalando en forma secundaria las diferencias con las posturas de los compañeros caídos, se mantuvo cuando se reclamó la libertad de los militantes del Partido Comunista y se repudió la ilegalización de la Federación Juvenil Comunista durante el gobierno de Illia. (4) La misma línea continuó mucho tiempo después con la denuncia de la masacre del Ejército cuando fue el ataque al cuartel de Monte Chingolo y la solidaridad frente a la muerte de Mario Roberto Santucho y otros dirigentes del PRT y el ERP, en plena dictadura militar. (5)
En la etapa inmediata anterior al surgimiento orgánico de VC afloran características que van a permear hasta el presente esta organización y que refieren conductas indómitas y desafiantes ante el aparato represivo y sus elementos provocadores.
Fue durante las movilizaciones que se llevaron a cabo en la ciudad de Buenos Aires, cuna del partido, en el año 1965. Durante el acto del 1º de mayo de la CGT de unas doce mil personas, se produjo el ataque fascista más importante contra el PC y VC por parte de matones que fueron tolerados por la dirección del acto y los peronistas allí presentes. Al poco tiempo, en el acto organizado por la FUA y la CGT en solidaridad con el pueblo de la República Dominicana que sufriera la segunda invasión norteamericana, contra el imperialismo yanqui y por el retiro de sus tropas y en contra de la política sumisa del gobierno argentino, que contó con la participación de unas veinte mil personas, se produjeron provocaciones de los sectores fachos del peronismo, la Side y la policía. Estos fueron repelidos en su intento de copar el palco, produciéndose la muerte del compañero Grimbak, falleciendo en ese ataque Héctor Gatica quien fuera despedido por el C. de O. del fascista A. Brito Lima. La seguridad de la izquierda había estado a cargo de VC junto con compañeros de la FUA y entre todos repelieron a los provocadores.
Nuestros militantes se caracterizaron por ser, junto con los de otras organizaciones de izquierda, los que enfrentaron decididamente las bandas fascistas que agredieron esos actos y por las cuales éstas sufrirían bajas al igual que la izquierda. Pero el saldo ideológico fue clarísimo: no se iba a permitir que los fachos atropellaran y se llevaran por delante la protesta popular y antiimperialista. Había que repelerlos y si era necesario, con fuerza y plomos, la autodefensa que le llaman. (6)
Con la primera baja sufrida por el partido al ser asesinado Emilio Mariano Jáuregui por la Policía Federal Argentina en la Capital Federal el 27-06-1969, se verifica en carne propia la saña represiva y se va a delinear la índole de la respuesta que le merecen estos ataques, para constituirse en una constante.
En primer lugar, se responde con la movilización popular y combativa en conjunto con otros sectores políticos, sindicales y estudiantiles de la nueva izquierda, peronistas y cristianos revolucionarios. Con el proyecto de preparar y acumular hacia un desemboque violento la idea era poner el acento en la acción de masas, tarea política principal que permitiría el despegue posterior a nivel combatiente.
No hubo ajusticiamiento de ninguno de los verdugos que, por otra parte, eran no sólo el ejecutor sino la cadena de mandos que le ordenara asesinar, obedeciendo ello a la política antes descripta y también a debilidades orgánicas en el plano de la violencia revolucionaria. Así es que se priorizó el trabajo político y de masas por sobre toda acción comandista. Por ello la despedida de Emilio fue en la calle con los compañeros y amigos luchando contra las fuerzas represivas, denunciando al gobierno asesino, y así consta en las crónicas políticas e históricas de esos días.
Importa destacar que Emilio M.Jáuregui fue asesinado cuando participaba activamente de una manifestación contra la dictadura del Gral. Onganía y días previos a la visita a nuestro país de Nelson Rockefeller. El partido estaba en la acción luchando junto con la militancia revolucionaria y de la misma manera fue su acompañamiento último.
A partir de la muerte de Emilio, se perfila una conducta de VC hacia los caídos que se expresa en mantener viva su memoria, reivindicándose sus historias de vida y de lucha. Emilio Jáuregui será el ejemplo en la formación de los cuadros y militantes. Por ello, el Primer Congreso de VC llevado a cabo en Mar del Plata, Pcia. de Buenos Aires, en noviembre del año 1971, llevó su nombre. Además, el principal dirigente partidario, el “Cabezón” Cristina, efectuó el trabajo más completo hasta el presente de su trayectoria biográfica como hombre, luchador y revolucionario, lo que adquiere mayor relevancia tratándose de una figura como la de Emilio que trascendió con creces al partido, con el cual recién se había relacionado, habiendo tenido una destacada actuación gremial e intelectual. (7)
Se quiere significar con ello que, aún cuando otras organizaciones resaltaron la vida de Emilio y condenaron el crimen y sus ejecutores, no casualmente el que en forma sistemática y concreta se encargó de divulgar a todo el mundo el perfil de este marxista-leninista fue VC, responsable de decir con todas las letras quién fue Emilio Mariano Jáuregui.
La lucha por las libertades democráticas, la denuncia de la legislación represiva, de los crímenes y torturas de la dictadura y la libertad de los presos fueron banderas que nunca se arriaron. El área democrática constituye una en las que VC trabajó en forma constante junto con la sindical y universitaria. En este terreno el partido no tuvo que autocriticarse como lo hizo por ejemplo en el campo político, donde se pecó tradicionalmente de economicismo, por no tenerse la iniciativa requerida en este trabajo específico. (8)
Siempre se sostuvo la necesidad de la denuncia de los crímenes y la política represiva. Incluso anticipando las campañas de aniquilación que comenzaron con las ofensivas reaccionarias en el Gobierno de Isabel Perón y se plasmaron en forma sistemática con la dictadura del ´76. Así se fue advirtiendo la preparación del golpe militar reaccionario que apuntaba a todo el pueblo, intervencionismo militar alentado por el gobierno capitulador peronista, que pretendía arrasar con el campo popular y frente al cual se convocaba a la resistencia popular, con paro por tiempo indeterminado. Se denunció que se venía la dictadura abierta y sangrienta, proyecto fascista de recambio del peronismo con el que las clases dominantes acordaron la liquidación de las fuerzas revolucionarias surgidas desde 1969, para completar la tarea de Isabel Perón que tenía 4000 presos políticos en su haber, a más de 1000 asesinatos contra el pueblo en sólo un año. (9)
La represión no es solo la física de golpear, torturar y matar, se trata de destruir personas y organizaciones, e incluye la persecución ideológica y cultural. Así se recurrió al cierre de carreras universitarias, la anulación de contenidos progresistas, la censura y las prohibiciones. Está planificada con diversos objetivos y se inscribe en un proyecto de dominación. Por ello es fundamental el plantarse frente al mismo y denunciar su carácter y los mecanismos de que se vale y piensa ejecutar.
Asimismo, VC introdujo en la cuestión democrática la postura de unificarla con la lucha del conjunto del campo popular. Esta política se expresó en consignas como las de: “a los presos liberar con la lucha popular” e impulsó marchas a cárceles como la de Encausados de Córdoba el 3-03-1971, anticipando de alguna manera la que se realizaría hacia la de Devoto en Buenos Aires el 25-05-1973. Así se dio una nueva forma y otro contenido a la relación de los presos políticos con la gente y los compañeros libres, se unían las luchas libradas dentro y fuera de las cárceles para bien del avance de la lucha por las libertades, logrando el retroceso y la desmoralización represiva, a la par de la fortaleza de los encarcelados que hablaron en actos multitudinarios –unas tres mil personas fueron a Encausados-.
Porque vaya que sí tiene impacto hacia adentro de las cárceles la movilización de afuera al producirse el contacto entre la gente con su presencia, consignas y cánticos y los presos con sus palabras y emociones. (10)
El hecho de que se crearan nuevas organizaciones de solidaridad con los presos políticos como fue la OSPPEG, modificó de raíz el tradicional trabajo llevado a cabo por la LADH, que sin dejar de reconocerle sus aportes positivos, no propiciaba decididamente que estas banderas fueran levantadas por la lucha popular. Así no quedaría sólo en el accionar de los profesionales vinculados a los derechos humanos, el lograr defender exitosamente el respeto a la vida, la integridad y la libertad de los compañeros, sino que decididamente este eje se trasladaría a los reclamos mismos de las masas, que incorporaron en sus luchas generales por pan y trabajo la liberación de los presos y la derogación del andamiaje represivo. Se superó así el esquema limitado de las defensas profesionales, como también el enfoque que conducía al enfrentamiento de aparatos como manera de saldar favorablemente los reclamos democráticos. Por el contrario, los sectores populares como parte de su movilización debían encarar la conquista también de sus libertades. (11)
Esta línea de enfrentamiento con la represión no sólo se expresó en la lucha callejera o a favor de la libertad de los presos, sino también ante las diferentes facetas del sistema represivo. A nivel universitario no se dio respiro a la política dictatorial de cierre de carreras “conflictivas”, se enjuició a los profesores comprometidos con los proyectos gubernamentales, peleando por nuevos contenidos de los planes de estudio y contra la represión al movimiento estudiantil. Las clases dominantes apuntaron a la cultura en general, atacando las instituciones públicas de enseñanza mientras aumentaron las universidades privadas, se persiguió a las publicaciones progresistas, quemándose libros y reprimiéndose la producción cinematográfica en ambas dictaduras, siendo la más feroz la de 1976. (12)
Igualmente, a las arremetidas contra las asambleas y ocupaciones de fábrica, se les respondió con la actitud de no aflojarle y enfrentarlas junto con las bases, lográndose torcer el brazo de la patronal, la dictadura y la burocracia sindical en varios frentes, dando lugar a experiencias históricas del sindicalismo revolucionario y de liberación como fueron el Sitrac-Sitram de la Fiat de Córdoba. (13)
Aun cuando se observan errores de sectarismo e izquierdismo en la relación con otras fuerzas políticas del peronismo o de la izquierda reformista, que limitaron seguramente algunas de las respuestas a la represión en la medida que dejaron de engordar, quizás en alguna coyuntura, el marco de alianzas y su expresión práctica, trayendo como consecuencia cierto aislamiento. Sin embargo, el rol de vanguardia se cumplió al impulsar a diversos sectores populares a hacer frente y lograr el retroceso de las tropas y las trampas represivas garantizándose con ese proceder, el surgimiento de experiencias clasistas en lo sindical y de nuevo tipo de participación y combatividad en el movimiento estudiantil.
Las propuestas de VC en lo democrático guardaron íntima vinculación con la política de fondo y la referida al momento histórico de que se trataba. Así los caídos que registra VC van a relacionarse directamente con lo sucedido a nivel general y en el marco de la lucha por la liberación librada contra el aparato gubernamental reaccionario de la gran burguesía nativa y el imperialismo yanqui.
No fue casual que con la política de presionar con la movilización de masas frente a las cárceles por la libertad de los presos políticos y su amnistía, en el penal de Villa Devoto de la Capital Federal fuera asesinado el compañero Carlos Miguel Sfeir, de sólo 17 años, de la agrupación Fuerza Antiimperialista de Estudiantes Secundarios (FAES) dirigida por el partido, lo mismo que el compañero Oscar Horacio Lisak de 16 años de edad, de JP-Montoneros. Era la noche del 25-05-1973 cuando el pueblo motorizado por los sectores revolucionarios y en pleno auge de la lucha de los setenta, logró la amnistía y la derogación de parte de la legislación represiva. Pero la dictadura mediante una salvajada represiva se iba a cobrar estas victorias parciales con la sangre de estos jóvenes. Ya finalizando la movilización en la cárcel las fuerzas represivas hirieron a Sfeir con un disparo de fusil Fal impidiendo que fuera auxiliado de inmediato. Además, hubo otros veinte heridos de bala en este operativo de la Seccional 45° de la Policía Federal Argentina a cargo del Crio. Alfredo A. Aguirre, en el que también colaboró el Servicio Penitenciario Federal.
Ante estos hechos, VC encabezó la denuncia pública reclamando el desmantelamiento represivo, impulsando una comisión parlamentaria investigadora a través de un proyecto del diputado Héctor Sandler. Hubo también un comunicado de los diputados del FREJULI- Tendencia Revolucionaria, Diego Muñiz Barreto y Rodolfo Vittar pidiendo también por estos mismos puntos. En la causa política y judicial intervino como abogado patrocinante el camarada, luego desaparecido en 1978, Abraham Hochman, quien participó de la marcha de estudiantes secundarios al Congreso de la Nación reclamando por el juicio y castigo de los asesinos de Sfeir y Lisak
Frente a este nuevo manotazo represivo se siguió la línea estratégica de VC que no consideraba que por la asunción del nuevo gobierno democrático del Frejuli con Héctor J. Cámpora iba a desaparecer como por arte de magia el aparato represivo, y por eso denunció con todas las letras su accionar, a diferencia de otros sectores que confiaron en un comienzo en que las cosas se desarrollarían de otra manera y por ello no destacaron ni hicieron la denuncia con igual magnitud y alcance. (14)
VC impulsó la línea de continuar la lucha antidictatorial y contra los ataques reaccionarios corporizados en la matanza de Ezeiza y en el plano internacional con el golpe fascista de Uruguay y los preparativos contra la Unidad Popular de Chile. De allí provino la política de la lucha de masas por el juicio y castigo de los crímenes de Villa Devoto como de la anterior masacre de Trelew.
Esa huella mortal que dejaba la dictadura militar al retirarse tácticamente, se insertaba en un ciclo que a nivel político inauguraba un acercamiento de VC con otras organizaciones revolucionarias, que se continuaría en el tiempo y que llevaría a renovar alianzas con sectores peronistas revolucionarios característica de la nueva izquierda argentina, que superaba así el marco de acuerdos que efectuaran hasta entonces sus sectores tradicionales. De esta forma estuvo el 1° de mayo de 1974 al lado de la JP y los Montoneros cuando se retiraron de la Plaza de Mayo luego de los improperios del Gral. Perón en contra de la Juventud Peronista, y después también en la lucha contra el gobierno de Isabel Perón y López Rega.
Es en esta etapa en que nuevamente serían golpeados los grupos revolucionarios, incluidos VC, cuando son muertos por las bandas de la Triple A, el 23 de octubre de 1975, los camaradas Raúl Kossoy de 25 años y Ana María Estevao, de 22, en la zona sur del conurbano de la Provincia de Buenos Aires, donde se desarrollaba un intenso trabajo reprimido por la reacción peronista. Raúl era el Secretario de Organización de VC en la Provincia de Buenos Aires atendiendo, entre otros, a los obreros de los Astilleros Río Santiago de La Plata y los de la fábrica del vidrio Rigolleau. Ana María era periodista del periódico “La Voz de Solano”, órgano de prensa que sufrió también la detención de sus miembros y la desaparición de su director Santiago Servin en 1977, también camarada. Sus muertes fueron informadas por la prensa de la época, siendo velada Estevao en el local de los Bomberos de San Francisco Solano. El Sindicato de Prensa de Capital –el mismo que supo ser dirigido por Emilio Jáuregui- repudió el asesinato de esta colega y la APBA amenazó con concretar un paro. (15)
En ese mismo final de 1975, en el mes de noviembre, en la Provincia de Mendoza también se produce una ola de detenciones y tortura de militantes de VC, siendo desaparecido por el ejército Luis Moriña Yung, estudiante de tercer año de la carrera de medicina de la Universidad Nacional de Cuyo y Secretario de Organización de esa regional. Es que como anticipábamos, el partido en Mendoza aplicaba la línea general de defender los gobiernos provinciales elegidos democráticamente en 1973 que pertenecían al sector de la tendencia revolucionaria que comenzaron a ser asaltados por el ala fascista de López Rega y la burocracia sindical. En Mendoza éstos depusieron al gobernador progresista Alberto Martínez Baca como en Córdoba habían hecho con el gobernador Ricardo Obregón Cano, en Salta con Miguel Ragone y en Buenos Aires con Oscar Bidegain.
A raíz de la resistencia y la lucha en Mendoza, VC sufrió el secuestro de catorce miembros de los cuales fue desaparecido y ejecutado el “Chino” Moriña, de inclaudicable conducta para con sus torturadores, dirigente de TUPAC de Medicina. De esta forma, VC seguía recibiendo golpes del gobierno de Isabel Perón por su postura consecuente de defensa de los intereses populares y por luchar junto con sectores del peronismo revolucionario. (16)
Eran los tiempos de las Coordinadoras Obreras que lograron voltear al “Brujo” López Rega y que lamentablemente no alcanzarían para frenar el golpe militar de 1976. El partido estuvo entonces en la resistencia popular –el Villazo- de Villa Constitución como antes en el Sitrac de Córdoba, en el ingenio Ledesma de Jujuy y en las movilizaciones de Buenos Aires contra la ofensiva reaccionaria sustentada en las AAA (Alianza Anticomunista Argentina) y en el apoyo yanqui al plan golpista de aniquilamiento de las organizaciones revolucionarias y de masas. (17)
Por entonces, había una fuerte influencia de la disputa internacional entre la República Popular China y la URSS, y en forma incorrecta VC se alineó decididamente en la tesis del “socialimperialismo”. Como derivación de esto, criticó a Cuba por su postura prosoviética contra el PC Chino y descalificó su correcta ayuda militar internacionalista a Angola. Sin embargo, en la lucha nacional nunca se perdió la brújula de considerar al imperialismo yanqui como el enemigo principal que operaba desde las FFAA y los sectores económicos dominantes del país. Por ello se produjo una clara divisoria de aguas respecto a la línea sostenida por el PCR, distanciándose así con este partido que antes pertenecía a la izquierda revolucionaria y pasó luego a defender el gobierno de Isabel Perón colocando a los rusos como blanco fundamental de la lucha popular. Esta polémica interna trascendió incluso a nivel intelectual con la renuncia a la revista “Los Libros” del escritor Ricardo Piglia quien coincidía con VC. Carlos Altamirano y Beatriz Sarlo se quedaron dirigiendo la revista en sintonía con la errónea política del PCR. (18)
Fue en ese contexto que se ingresa al período más duro y terrible de los golpes represivos recibidos por el pueblo argentino y sus organizaciones políticas incluidas VC. Para comprender la línea que aplicó este partido debe partirse de cuál fue la conducta previa que se viene revisando y su aplicación ahora frente al plan de aniquilamiento al que decididamente acudieron las clases dominantes de la Argentina.
Como era tradición, la postura fue la de enfrentar esta nueva ola sanguinaria sin esquivarle el bulto, promoviendo la movilización y resistencia popular que se resumió en la consigna de “Parar, ocupar y luchar” frente al golpe del 24 de marzo de 1976. Bajo este “paraguas”de base se instrumentarían los paros de fábricas como los de Smata de Córdoba. (19)
Con vigor se denunció y desenmascaró a la dictadura militar y sus crímenes, planteándose hacer conocer cada desaparición, presentando hábeas corpus y promoviendo la solidaridad popular e internacional, a diferencia de sectores como el PCA que se mostró complaciente con los generales Jorge R. Videla y Roberto E. Viola, u otras organizaciones que ponían sus esfuerzos ya desde antes en la lucha de aparatos. VC desenmascaró el origen fascista de la dictadura de 1976 y el liquidacionismo que representaba para las fuerzas revolucionarias y populares.
¿Cuál era la importancia de la línea de marcar a fuego los planes y prácticas represivas frente a la ofensiva del terror de la dictadura militar? Imaginen que en la Argentina del 75/76 todo el arco de la izquierda –incluido el PCA- junto con los demás sectores democráticos y progresistas hubieran mantenido una conducta similar de desenmascarar y luchar decididamente contra este plan de exterminio, a nivel local e internacional. Muy distinta hubiera resultado la situación política y las consecuencias para el campo popular, el aislamiento desde el vamos que le habría producido a la dictadura, junto a la lucha popular y la conciencia social generada, seguramente hubieran frenado muchas de las campañas genocidas producidas.
Porque las claudicaciones de no denunciar a la dictadura, confundiendo sobre su verdadero carácter de terrorista de estado, bajando el tono de la lucha democrática o abandonando este terreno de la confrontación en un enfoque de aparato, no aportaron precisamente a que pronto hiciera agua este proyecto del sistema capitalista dependiente argentino. (20)
En la práctica, efectivamente, se dieron casos de compañeros que fueron rescatados de las patotas por las protestas y resistencia en el momento del secuestro de los afectados y su entorno, como el de los compañeros de trabajo del Sindicato de Luz y Fuerza de la Capital Federal. (21)
Una orientación clave de VC fue la de promover la organización de los familiares de los desaparecidos y detenidos, de allí que intervino en lo núcleos que dieron origen a las Madres de Plaza de Mayo. Por la tarea de denuncia y reclamo por los compañeros secuestrados, las Madres y VC fueron objeto del castigo por parte de la Marina de Guerra a través del operativo que se montara –teniente de fragata Alfredo Astiz mediante-, contra los asistentes a la reunión de los familiares en la Iglesia Santa Cruz de la Capital Federal, el 8-12-77 y que culminara el 10-12-77 con el secuestro
de 12 personas, entre ellas, la dirigente máxima de las madres, Azucena Villaflor de Devincenti, e incluyeron a las monjas francesas Alice Domon y Leonie Duquet, y a nuestros camaradas Angela Aguad, Patricia Oviedo, Eduardo Gabriel Horane, Horacio Aníbal Elbert y Raquel Bulit, los que previo paso por la Escuela de Mecánica de la Armada fueron asesinados y desaparecidos. La camarada Norma Raquel Falcone, primera abogada que tuvo la causa de la Iglesia Santa Cruz, fue secuestrada el 27-7-78 y aún permanece desaparecida. (22)
VC saludó desde el comienzo los primeros pasos de las Madres que sacaban solicitadas y denunciaban los campos de exterminio y los crímenes de Videla y Cía., ya que era parte de su línea: ”1°) agrupar familiares de presos y desaparecidos, 2°) divulgar, denunciar toda detención y secuestro, 3°) aprovechar las armas legales: hábeas corpus, pedidos de informes, etc 4°) organizar la solidaridad con los presos incluyendo petitorios, poniendo de ejemplo a Luz y Fuerza de Buenos Aires que había rescatado a desaparecidos, y así parar la represión”. (23)
Porque además, desde el principio, la dictadura militar empezó a secuestrar y desaparecer camaradas de VC (ilegalizada y “disuelta” con el nombre de PC m-l, junto con otros partidos el mismo día del golpe) al igual que de las demás organizaciones populares y revolucionarias, a lo largo y lo ancho del país.
En las provincias de Salta y Jujuy fueron secuestrados y desaparecidos los abogados José Pablo Bernard y Carlos Alberto Patrignani, Aldo Sampanini –ex activista del Frigorífico Wilson- y Jorge Osvaldo Weisz. Estos camaradas llevaron a cabo un gran trabajo político y sindical en esta zona y por ello fueron represaliados. Weisz y Patrignani organizaron la recuperación clasista del gremio del Ingenio Ledesma y la lucha contra la patronal de los Blaquier, que no se anduvo con vueltas y desde la época del gobierno peronista de Snopeck en 1974 detuvo a estos compañeros y luego desde la cárcel de San Salvador de Jujuy los desaparecieron en 1976 miembros del RIM 20 perteneciente al Tercer Cuerpo de Ejército. (24)
En la Provincia de Tucumán fue secuestrado Pedro Guillermo Rubio, quien había tenido una activa militancia en el frente universitario y el Tucumanazo. (25)
En la Provincia de Buenos Aires, desaparecieron a Ana María Conti Mattei de Gómez de su domicilio en Olivos, enfermera de Neonatología del Hospital Rivadavia; a Santiago Servin Benítez, un camarada de nacionalidad paraguaya y Director del periódico “La Voz de Solano”; a Julio Galeano Alvarez, obrero de la construcción tucumano de origen universitario; a Hugo Massuco, dirigente obrero de Astilleros Río Santiago, AFNE, Ensenada; a María Cristina Moralejo Rodríguez, delegada en el gremio de la Sanidad, Seccional Quilmes, y a su esposo Hugo Oscar Sánchez Vizcayada, empleado de publicidad; a Marcos Daniel Chueque D’Annunzio, obrero metalúrgico y ex estudiante universitario de Mar del Plata; a Humberto Nicolás Romano, ex miembro de la Comisión Interna de Tensa, Munro, y a Alfredo Jorge Lipnizky secuestrado el 2-2-77 en la fábrica donde trabajaba en Valentín Alsina.
En Santa Fé secuestraron a Guillermo White, de la juventud partidaria, activista del Frigorífico Swift de Rosario. Mientras en Córdoba era desaparecido el 3-06-76 Víctor Hugo Paciaroni “Barbijo”, ex Secretario General del Centro de Estudiantes de Arquitectura de Córdoba y luego delegado obrero ferroviario del ramal Mitre en Villa María. (26)
Esta feroz ofensiva dictatorial nacía del odio hacia los militantes que habían construido un partido de clase y orientado en el camino de la liberación algunas organizaciones de masas en lo sindical, el frente universitario y el campo de los derechos humanos.
La respuesta como comunistas fue la de volver a denunciar los crímenes de esta nueva dictadura, no otorgándole ni un milímetro de consideración. Incluso en esta tarea se saludó la solidaridad internacional haciendo hincapié en el carácter fascista de Videla y su Junta y la importancia de su aislamiento a este nivel.
La tarea era formar un amplio frente antidictatorial y democrático, dejando de lado dogmatismos y sectarismos que no aportaron en unir todo lo que se pudiera contra el gobierno militar, los monopolios y los yanquis. En esa senda se rescataron políticamente actitudes de algunos sectores del gobierno norteamericano que tuvieron contradicciones con la dictadura en cuanto a los derechos humanos. (27)
VC –a esa altura PC m-l- fue consciente de que era uno de los blancos del aparato represivo y reiteradamente dio cuenta de estos planes, preparando a su dirección y militantes para la embestida que ya venía practicándose pero que se descargaría en Buenos Aires con todo el peso del Primer Cuerpo de Ejército y sus grupos de tareas. (28)
En esta etapa decisiva los principales dirigentes de VC, empezando por su Secretario General Roberto Cristina, no aceptaron ser retirados del país. Querían compartir los riesgos que corrían sus camaradas, los caídos y los que estaban con vida, la misma suerte que su pueblo. Si bien fueron sacados unos pocos dirigentes al exterior –como reserva y para organizar la solidaridad- el grueso se quedó a seguir luchando porque entendían que la revolución los reclamaba aquí y confiaban en que los milicos no iban a tener la suerte de perpetuarse en el poder. (29)
Este es uno de los rasgos para entender qué clase de militantes y responsables se habían formado a lo largo de los años en VC y cómo respondían ante las circunstancias de vida o muerte que aquí se plantearon.
Así se llegó al mes de julio de 1978 en que se desató una ofensiva represiva como nunca antes había afectado a VC, resultando el partido gravemente golpeado en sus dos principales regionales: las de Provincia de Buenos Aires y Capital Federal, incluido el Secretariado Nacional completo y gran parte del Comité Central. (30)
Esta campaña militar comenzó con el secuestro de tres compañeros, Martín Vázquez, Guillermo Moralli y Juan Miguel Thanhauser, y luego alcanzó en total a más de sesenta, todos practicados por personal de seguridad a las órdenes de los militares del Gral. Guillermo Suárez Mason, los que fueron llevados al campo de concentración “El Vesubio”, dependiente de la Central de Inteligencia del Regimiento 3° de Infantería de La Tablada, Provincia de Buenos Aires. Allí fueron torturados, muertos varios de ellos, permaneciendo un total de diecinueve desaparecidos.
De estas personas, un primer grupo de aproximadamente quince, compuesto por familiares sin vinculación partidaria, luego de ser secuestradas durante algunas horas o días, fueron abandonadas en libertad en la vía pública en forma irregular.
Un segundo grupo, de treinta y cinco compañeros, luego de permanecer desaparecidos entre mediados de julio y agosto hasta septiembre de 1978, fueron legalizados en su detención entre el 8 y el 14 de este último mes. Siendo dejados en una farsa de operativo en seis unidades militares, para luego ser sometidos al Consejo de Guerra Especial Estable del Ejército y finalmente de la Justicia Federal, que ordenó sus libertades en mayo de 1979 y luego sobreseyera en su favor las causas iniciadas por estas “actuaciones” de las que resultaron víctimas.
Entre otros, lo integraron Javier Gustavo Goldin, Cristina María Navarro, Arnaldo Jorge Piñón, Alfredo Eduardo Peña, Roberto Oscar Arrigo, Cecilia Vazquez de Lutzky, Rolando Albeto Zanzi Vigeureux, Estrella Iglesias Espasadin, Horacio Russo, Celia Criado, Alfredo Smith, Osvaldo Moreno, Laura Waen, Roberto Gualdi, Osvaldo Stein, Miguel Fuks, José Portillo, Raúl Contreras, Enrique Varrin, Ricardo Daniel Wejchenberg, Juan Paniagua, Jorge Goldberg, Nieves Marta Kanje, Guillermo Alberto Lorusso, Daría Emilio Machado, Jorge Watts, Juan Frega, Faustino Fernández, Rubén Darío Martínez y María Angélica Pérez de Micflick. Esta práctica de legalizar a detenidos desaparecidos se aplicó anteriormente en “El Vesubio” con un grupo de ex alumnos del Colegio Carlos Pellegrini de Capital Federal y de secuestrados en Berazategui y Mercedes, Provincia de Buenos Aires. (31)
Finalmente, continúan desaparecidos diecinueve camaradas: Roberto Luis Cristina, Beatriz Leonor Perosio, Saúl Micflik, Mauricio Alberto Poltarak, Esther Gersberg de Díaz Salazar, Luis Miguel Díaz Salazar, Hugo Vaisman, Rubén Bernardo Kriscautzky, Osvaldo Domingo Balbi, Jorge Rodolfo Montero, Norma Raquel Falcone, Abraham Hochman, Elías Semán, Luis Pérez, Ernesto Szerszewiz y Víctor Volloch, junto con los primeros tres secuestrados que antes se mencionaran.
El Vesubio estaba ubicado en Cno. de Cintura y Autopista Richieri, en La Matanza, siendo descripto por varios de los sobrevivientes que lograron su ubicación exacta el 9-12-83, tras una conferencia de prensa organizada por el Partido de la Liberación en un hotel céntrico de la Capital Federal. Desde allí se fue en automóviles y remises hasta el lugar, entrando la prensa por primera vez al ex predio del Servicio Penitenciario Federal lindante con unidades de la Policía de la Pcia. de Buenos Aires y por ello cercano a otro campo llamado “El Banco”. De las actividades de este antro participaron diversos organismos de seguridad bajo la dirección del Ejército Argentino a través de la Décima Brigada de Infantería Motorizada del I Cuerpo.
Las investigaciones llevadas a cabo por las denuncias y solicitudes de los camaradas sobrevivientes permitieron acumular un sinnúmero de pruebas sobre el funcionamiento y sobre el personal a cargo de este lugar de exterminio creado en el año 1975 con el nombre de “La Ponderosa”. Asimismo, estos desaparecidos legalizados de “El Vesubio”, una vez en libertad impulsaron con otros, la formación de la Asociación de Ex Detenidos Desaparecidos, que denunció los crímenes de lesa humanidad de la dictadura militar, colaborando en el enjuiciamiento y condena de la Junta de Comandantes y participando en las movilizaciones por los derechos humanos. En esta etapa, la línea partidaria continuó siendo la de incorporar esta pelea a la del conjunto de las reivindicaciones populares por paz, pan y trabajo y la liberación nacional y social, sosteniendo la memoria de los camaradas, a través de lo que pensaron y soñaron sin ocultar que fueron comunistas revolucionarios, levantando bien alto sus banderas rojas y patriotas para ejemplo de la juventud y la sociedad argentina toda. De allí que en las declaraciones judiciales se hizo expresa mención de la militancia de los secuestrados y así consta en los documentos oficiales. Además de los testimonios aportados por los camaradas damnificados y sus familiares, sobre el total de setecientos casos presentados por la acusación de la Fiscalía, veintiséis pertenecieron a miembros de VC y familiares de éstos, entre los que se basó la condena -insuficiente y que adhiere a la teoría de los dos demonios- impuesta a los comandantes genocidas Videla, Massera y Viola, incrementándose su importancia porque en esta instancia se tuvieron en cuenta sólo una parte del total de los casos.
Todos ellos sirvieron para la condena de: 1°) Jorge R. Videla, entre otros delitos, por los de privación ilegítima de la libertad calificado por haber sido cometido con violencia, amenazas, reiterado en 306 oportunidades, de los cuales 15 correspondieron a miembros de VC y un familiar de estos (Casos 159, 360 a 368, 385, 414 y 530 en dos oportunidades), tormentos reiterados en 93 oportunidades, de los cuales siete casos fueron de compañeros del partido (casos 159 y 361 a 368) y robo reiterado en 26 oportunidades, de las cuales una corresponde a un miembro de VC (caso 363); 2°) Emilio Massera, como autor entre otros delitos de privación ilegal de la libertad calificada en 69 oportunidades, de las cuales 3 son casos de miembros de VC (N°212, 215 y 217); y 3°) Roberto E.Viola, como autor doloso entre otros delitos de privación ilegal de la libertad calificada reiterada en 86 oportunidades, de las cuales 17 son víctimas miembros de VC (casos 156 a 159, 361 a 373, 385 y 405) y por tormentos reiterados en 11 oportunidades, de los cuales siete casos son de militantes de VC ( N° 157, 158, 363, 369, 372, 373 y 405). (32)
Resta identificar al jefe de inteligencia del campo de concentración El Vesubio, apodado “El Francés”, quien a las órdenes del Teniente Coronel Crespi tenía una responsabilidad principal en los crímenes de lesa humanidad allí cometidos, contándose con varios elementos informativos para hacerlo. También falta determinar el destino que se diera a los diecinueve compañeros que quedaron desaparecidos por los militares del Primer Cuerpo.
El comportamiento de los camaradas en estas nuevas e inéditas condiciones represivas fue desparejo, aunque no hubo nadie que se quebrara al punto de pasarse al bando enemigo. Su dirigente máximo, Roberto L. Cristina en medio de la tortura defendió a capa y espada su naturaleza revolucionaria y planteó la necesidad de un plan de fuga. El número tres de VC, Jorge Montero, también estuvo al nivel de su responsabilidad. Así pudieron dar ejemplo a los otros militantes que sufrían igual castigo de sus captores, siendo sus referentes en esas instancias, aunque no pudieron impedir que los milicos concretaran gran parte de su plan de aniquilamiento.
Deben destacarse a los compañeros como, entre otros, el “Gordo” Roberto Oscar Arrigo, quien se resistió al momento de su secuestro, arrojándose al piso e intentando por todos los medios no ser llevado. Esto lograron en primera instancia, Héctor Hugo Cavallo y el “Gordo Polenta”; este último, pudo advertir del golpe represivo a Rubén Kristkaustky, quien no tuvo igual actitud y fue secuestrado junto con su familia. A pesar de ser el número dos partidario, no actuó como tal y por ello dejó de tener esa responsabilidad.
Digna de recordarse fue la conducta de los compañeros “chupados” en “El Vesubio”, cuando frente al asesinato de Luis Pérez cantaron juntos el Himno Nacional, pese a los golpes y castigos de la guardia. O el apoyo moral que significó que un dirigente histórico del partido como Elías “Turco” Semán, en medio del terror allí imperante, manifestara que si a los cristianos no los pudieron parar los romanos y sus leones, menos podrían terminar los militares con los comunistas. Como el heroísmo de la presidenta de la Asociación de Psicólogos de Buenos Aires, Beatriz Perosio, una mujer que demostró inmensas agallas frente a las bestias que trataban de quebrarla. Igual que compañeros como Jorge F.Watts que no aflojó y pagó con secuelas físicas su resistencia. Igual que Víctor Hugo Pacciaroni, secuestrado en Córdoba horas antes de una importante reunión partidaria, que se llevó a cabo igualmente contando a favor con su conducta inquebrantable. O lo que hizo Luis Moriña en Mendoza, quien desafió y no se permitió ninguna táctica en el trato con sus secuestradores. Esos fueron y son los modelos del Partido en la lucha contra la represión y las campañas de exterminio. (33)
Hubo, sin embargo, compañeros que no estuvieron a la altura de sus responsabilidades. Unos, no adoptando las medidas adecuadas en prevención de los ataques represivos; otro, que directamente colaboró brindando información y facilitando la caída de sus camaradas, y aquellos que no soportando los suplicios, fueron obligados a entregar información y a participar en citas convenidas por los represores.
Debe agregarse además al accionar represivo descargado sobre VC, a las innumerables detenciones sufridas a partir del gobierno de Isabel Perón y de la dictadura militar de 1976, junto con la persecución y órdenes de captura de varios dirigentes partidarios que sin ausentarse del país continuaron su militancia en la clandestinidad y dentro del país, como el ex obrero Roberto Nájera y los miembros del Comité Central Mario “Ñato” Geller y Sergio Ortiz, entre otros.
Sobre la amplitud y profundidad del golpe sufrido en 1978 cabe acotar que se trataba de la ofensiva de un enemigo poderoso equipado materialmente y con inteligencia, que venía de destrozar otras organizaciones revolucionarias. Y que VC no había experimentado antes semejante copamiento y tampoco pudo enfrentarlo adecuadamente en un marco de retroceso y derrota del campo popular. También habrá que valorar el peso político de ciertos errores oportunistas de derecha en política internacional que pudieron disminuir la fortaleza ideológica frente al enemigo que representaba al imperio yanqui, y una concepción idealista de los métodos represivos que sobreestimó la capacidad de superarla.
En conexión con esta experiencia, un elemento a tener en cuenta es la necesidad de un mayor fogueo combativo sobre todo en etapas de auge revolucionario. Seguramente si muchos de los compañeros “chupados” hubieran pasado antes por la experiencia de la tortura y el enfrentamiento directo con los represores, no hubiera sido igual la sorpresa y el alcance del daño infligido por estos asesinos.
A nivel internacional y local siempre fueron motivo de entrenamiento práctico los militantes más convencidos y eso ayuda también en sus comportamientos a la hora de enfrentar al enemigo. Ese alistamiento hubiera tensionado y endurecido adecuadamente a los compañeros para resistir todavía mejor, a la par de la formación de lucha en general. (34)
Sin embargo, no pudieron acabar con los sueños de VC de una Argentina liberada porque aquellas semillas rojas sembradas desde los sesenta seguirían dando sus frutos y nuevos árboles crecieron y mantuvieron viva la necesidad de un partido de clase que defendiera el objetivo de la lucha por el poder y la liberación.
Por ello, el “No Transar”, al año siguiente de su último número del año 1978, un 9 de agosto de 1979, volvió a salir de nuevo desafiante, en la búsqueda de un destino independiente y socialista. (35)
Es importante recalcar que en todos estos años el Partido ha participado activamente de las movilizaciones por derechos humanos que culminaron exitosamente con la anulación de las leyes de la impunidad. Y en consecuencia, como parte de la lucha por el juicio y castigo, impulsó la reapertura de la causa Vesubio y Primer Cuerpo de Ejército mediante una presentación como querellante de varios familiares y la Comisión de Homenaje a los Desaparecidos y Mártires Populares, el 10 de diciembre de 2003 ante el juzgado federal de Rodolfo Canicoba Corral.
Asimismo merece la pena puntualizarse que el 24 de marzo de 2004, cuando el presidente Kirchner dispuso el traspaso del predio de la ESMA a un futuro Museo de la Memoria, el Partido de la Liberación fue el único partido de izquierda que se hizo presente junto a los organismos de derechos humanos y otras numerosas organizaciones sociales y políticas. Ese día la bandera roja del Partido y una gran pancarta de Roberto Cristina entraron hasta las escalinatas del que fuera principal centro del horror, como forma de decir “30 mil compañeros desaparecidos, presentes”.
Los compañeros torturados, los asesinados y los desaparecidos, todos los caídos “no tienen divisa: son la divisa” como dijeron de sus héroes los compañeros Tupamaros de Uruguay. Aquí se trató de destacar la personalidad, las ideas y la conducta de algunos de ellos, que son parte de ese conjunto de camaradas, que sin distinciones partidarias son nuestros caídos, nuestra bandera. (36)
NOTAS
(1) Ver No Transar –en adelante NT- n°195 del 13-04-1977. Este periódico comienza a ser órgano de Vanguardia Comunista a partir del NT n°42 del 5-4-65, en que se da a conocer su formación. Antes era expresión del PSAV (Partido Socialista Argentino de Vanguardia). Sobre detalles del caso Vallese puede ampliarse en el libro de Francisco “Paco” Urondo, Los pasos previos –publicado y dado a conocer antes como Los penúltimos días-, Ed. Adriana Hidalgo, Villa Ballester, 1999.
(2) Ver NT n°49 del 6-9-65: “Felipe Vallese”, dando cuenta que a tres años de su secuestro la UOM lo recordó con un paro matero de diez minutos y la LADH con una ofrenda simbólica. La memoria de los camaradas ha sido una constante de VC (actual Partido de la Liberación) que consiste en no olvidar y levantar su ejemplo como el de los demás caídos, para aportar a la lucha actual en conjunto con sectores revolucionarios, tal como lo hace la Comisión de Homenaje a los Desaparecidos y Mártires Populares que realiza anualmente actos en Córdoba y otras provincias en honor a los compañeros desaparecidos en unidad y por un proyecto revolucionario. Asimismo, en la ciudad de Buenos Aires se constituyó la Comisión de Familiares y Compañeros de Detenidos-Desaparecidos del Campo de Concentración “El Vesubio” que está integrada entre otros por ex miembros del PL y que también efectúan actos y otras actividades de recordación de los camaradas y demás desaparecidos en ese campo, aunque sin destacar la raíz partidaria de aquellos.
(3) Ver NT n°27, del 15-05-1964, “Gendarmería asesina. Sobre la guerrilla de Salta”; NT n° 28, del 05-05-1964: “Gendarmería sigue asesinando”. Sobre la postura de VC acerca del foquismo puede consultarse en la página www.pl.org.ar y en este libro, el artículo “Crítica de Vanguardia Comunista al foquismo”, que menciona la actitud frente a estos hechos. (4) Ver NT n°49 cit, “Libertad a los militantes comunistas”, aun cuando el Partido estaba en pleno proceso de constitución en abierta disputa con el revisionismo argentino.
(5) Ver NT n° 175 (N°48 de la nueva edición, del 31-12-1975): ”El ataque al 601” repudiando la masacre militar y la represión indiscriminada que alcanzó al vecindario de este cuartel, diferenciándose de esta táctica que no hacía el centro en preparar al pueblo en la resistencia al golpe; NT n°189, del 11-08-1976: “Ante el asesinato de Santucho, Urteaga y Mena.Carta al PRT”, resaltaba la unidad de los revolucionarios aún con la polémica, y diferenciaba el rol del PCA que se dedicaba a aconsejar a la dictadura como erradicar la subversión.
(6) Ver NT n° 44, del 14-05-1965: “Provocación fascista y vandorismo antiobrero: dos caras de una misma moneda”; NT n° 45, del 5-06-65: “Provocación no impedirá la lucha antiimperialista”. Rinde homenaje al compañero Grimbak y advierte a la fachada que en caso de que se intente atacar al pueblo recibirán su merecido.
(7) Para ampliar sobre la vida de Emilio Mariano Jáuregui, su vinculación con VC, y los hechos en que lo asesinan, se puede consultar: NT, n° 80, del 1°-07-1969, “Convocatoria al combate”, “El crimen y nuestra respuesta” y NT, n°82, del 16-09-69, “Emilio Jáuregui: Nuestra Palabra miente” ; también JUAREZ, Guillermo (seudónimo de Roberto CRISTINA): “Emilio Jáuregui, bandera de lucha”, Cuadernos Rojos N° 1, edic. VC, julio de 1970, p.5, que contiene además dos artículos del propio Emilio y una separata de Andrés Rivera titulada “El protagonista”. Ver también: SOTO, Américo, “Emilio Mariano Jáuregui y Vanguardia Comunista” en www.pl.org.ar y en este libro. En el diario “El Mundo”, Bs.As., desde el 17-05-1966 y hasta el 23-05-66, aparecieron seis notas sobre “Vietnam, la guerra más larga del siglo” de Emilio M. Jáuregui y E. Jozami. Ver además “Cristianismo y Revolución”, N°14, segunda quincena de abril de 1969, pp.34/40. Asimismo en esta revista, se publicita que en la semana del Centro de Estudios Camilo Torres, Emilio estuvo a cargo los jueves a las 20 hs. del curso sobre “Movimientos de Liberación: China y Vietnam”, iniciado el 7-4-69, anuncio que se reitera hasta en el n°16, 2° quincena de mayo de 1969.
(8) Ver 5° Reunión del Comité Central de la primera quincena de mayo de 1973, en la que se describe la iniciativa impulsada por la 3° Reunión del CC de creación de la FRA (Fuerza Revolucionaria Antiacuerdista) y de su periódico “Desacuerdo”, como la iniciativa política más importante en la disputa con otras variantes contra el Gran Acuerdo Nacional de Lanusse, frente al déficit tradicional de economicismo. Definía como segunda tarea el combate democrático y planteaba la organización de un amplio movimiento por la libertad de los presos y la derogación de la legislación represiva.
(9) Ver NT n°166, del 20-08-75, editorial:“¿Cómo impedir el golpe de estado?”; NT n°168, del 17-09-75, editorial:”Así se prepara el golpe”; NT n° 172, del 19-11-1975, editorial: “Escupiendo al cielo”, alertaba sobre el proyecto militar proyanqui de ahogar en sangre a la clase obrera y las organizaciones populares; NT n° 175 cit. “Alerta el fascismo no fue derrotado”; NT n° 180 (N°53 nva.ed.), del 25-02-1976: “Ni Isabel ni los militares, hay una salida popular”
(10) Ver “Desacuerdo”, periódico de VC que luego fuera el vocero de la Fuerza Revolucionaria Antiacuerdista que fundara junto con el PCR para oponerse al Gran Acuerdo Nacional de Lanusse. Se editaron veinticuatro números entre mayo de 1972 y junio de 1973, N° 4, del 21-06-72: “El 3 de marzo de 1972 los presos hablaron al pueblo”; N°18, del 17-01-73: “La dictadura retrocedió en la legislación carcelaria”; N° 24, del 7-6-73 –último en salir-: “Conquista popular: indulto y amnistía”; ver también NT n° 107, del 26-01-72, “Con la lucha popular a los presos liberar”. En Memorias del Calabozo, Mauricio Rosencof y Eleuterio Fernández Huidobro (Ed. Exalaparte Colecc. “Gebara” Saila N° 16, Navarra, España, 1993), dirigentes de Tupamaros de Uruguay que estuvieron de rehenes en condiciones infrahumanas junto con Sendic y otros durante once años, seis meses y siete días, dan cuenta de la importante y benéfica influencia que tienen hacia adentro de las mazmorras las movilizaciones y la solidaridad externa.
(11) Ver “Desacuerdo”, N° 4 cit.: “La movilización de abogados y periodistas logró la libertad de Casiana Ahumada”, da cuenta de actividades de la OSPPEG en vinculación con las luchas sindicales; ver Partido de la Liberación, Comité Central, XVII Reunión Plenaria, 8 y 9/7/95: “Breve Historia del Partido de la liberación”, que contiene datos fundamentales para la historia de VC y su continuidad a través del PL -nombre que se adopta en 1983 en el III Congreso Nacional- mencionándose la participación de VC en la fundación en 1970 de la Organización de Solidaridad con los Presos Políticos, Estudiantiles y Gremiales (OSPPEG). Rev. Cristianismo y Revolución, Año IV, N° 28, abril de 1971, pp.51/52, comunicado de la OSPPEG: “la lucha por la libertad de los presos es parte inseparable del combate por borrar de nuestra patria un sistema”; ver NT n°107 cit. “A los combatientes prisioneros. Carta de VC a los presos”, destaca la polémica en derechos humanos y plantea unir la lucha de las organizaciones de solidaridad con la lucha popular contra la represión elevando su contenido político oponiéndose a que sólo sirvan para ayuda material y legal al estilo de la LADH, debiendo comprometerse en la lucha contra el GAN. (12) Ver NT n° 107 cit.: “Filosofía de Buenos Aires. Introducción a la historia”; “El GAN fue bochado en su ingreso a Arquitectura”, expresa la lucha por los nuevos contenidos y contra la represión; NT n° 108, del 08-03-1972: “Tupac de Buenos Aires opina: las instrucciones de Lanusse y la ley universitaria”: traza la propuesta de lucha antirrepresiva en conjunto con la resistencia a los planes culturales de los militares y sus aliados; “Desacuerdo” N° 24, del 07-06-1973: “Argentina: la cultura del aparato represivo”.
(13) Ver NT n° 107 cit.: “A un año de la toma de Fiat”; NT n°115, del 27-10-72: ”Lista Marrón del Smata. A un año de la represión contra Sitrac-Sitram”; “Ligas Agrarias contra la dictadura”.
(14) Ver NT n° 123, del 07-06-1973: “Quebrar la ofensiva reaccionaria”; “Caso Sfeir”. Ver “Desacuerdo” N° 24, 7-06-37 “Conquista popular: indulto y amnistía” cit. En la revista “El Descamisado”, Año I, N° 2 del 29-05-1973, vocero oficial de la tendencia revolucionaria peronista, cuyo director era Dardo Cabo, se tituló “El Tío Presidente libertó a los combatientes”, describiendo escuetamente la libertad de los presos políticos sin informar sobre la represión en Villa Devoto (p.3); “Una retirada sangrienta” refiere la provocación militar en Plaza de Mayo que terminó en represión popular (pag.10) e “Indulto primer acto del gobierno peronista”, al último del cual informa de un muerto y varios heridos como reacción del enemigo enretirada, sin dar nombres de los caídos. El diario “La Opinión” de Buenos Aires, el sábado 26-05-73 no registra información de la represión en Villa Devoto; el domingo 27-05-73 expresa que las manifestaciones apuraron las primeras excarcelaciones enfrentamiento popular con fuerzas de represión…dos menores muertos y varios heridos de bala (p.6). (15) Ver “La Opinión”, viernes 24-10-73, p.10 donde informa primero “Otra pareja asesinada”: en la localidad de San Vicente, sur de la Capital Federal, la pareja tenía vendados los ojos con franelas y presentaba numerosos impactos. El sábado 25-10-75, p. 9, informa que fueron identificados los cuerpos hallados el miércoles como pertenecientes a Ana María Estevao y Raúl Gregorio Kossoy. Ver NT n° 172 cit.: “Raúl y Ana: ni olvido ni perdón. A un mes del asesinato de Raúl y Ana María”. Reproduce una carta de Kossoy y se incluye un aviso de un acto en San Franciso Solano por estos asesinatos para el día domingo 23-11-75 a las 10 horas (p. 21). Raúl provenía de la Facultad de Exactas y luego pasó a Filosofía y Letras de Buenos Aires. El sepelio de Ana María en su Solano natal tuvo un marco multitudinario, ver PL, “Breve historia del PL” cit., p.5. Ver carta al Secretario Ejecutivo CIDH del Director Interino de “La Voz de Solano”, Antonio Iglesias.
(16) Ver NT n° 172 cit.: “Ataque a VC en Mendoza”. Nunca Mas, Informe de la Comisión Nacional sobre la Desaparición de las personas, Ed. Eudeba, Bs.As., 3° Ed., 1984, testimonio de Daniel Osvaldo Pina, Leg.5186 sobre Luis Moriña (pp.45/46). También se entrevistó al cro.Jorge Artacho en Mendoza, el 12-07-1998.
(17) Ver NT n° 181 (N°54 nva. edic.) órgano del PC m-l, ex VC, del 10-03-76, último número previo al golpe militar de 1976: “19 de marzo. A un año de Villa Constitución. Jornada nacional de combate”. “Hacia el 19. El partido a toda máquina. La movilización revolucionaria de masas como en Villa Constitución, puede torcer planes reaccionarios. “Evocando los mártires de Villa”; “Libertad a Piccinini, Rojo y demás presos de Villa Constitución”, por una jornada de lucha por presos e investigación de los crímenes. NT n° 202, del 09-11-1977: “Villa-Smata. Sobreseimiento de dirigentes de Villa constitución”: Alberto Piccinini y otros siguen a disposición del PEN al igual que los abogados Mireya Rojo y Saldosso y dirigentes del Smata detenidos desde 1974, Karlem y otros.
(18) Ver N°40 de marzo/abril de 1975, con el Comité de Dirección formado solamente por C. Altamirano y B. Sarlo, que contiene la renuncia de R. Piglia fundada en que la revista era un hacer cultural sobre la base de acuerdos políticos acerca de la contradicción principal que enfrenta el pueblo argentino, cuál es, el imperialismo norteamericano. Considerar nacionalista y tercermundista al gobierno de Isabel Perón es desconocer que la gran burguesía económica claudica y concilia con el imperialismo y si bien no es identificable con los yanquis, su política represiva, reaccionaria y antipopular favorece el golpe de estado. La política debe ser el centro de todo trabajo intelectual. La respuesta de Altamirano y Sarlo sostuvo que debe defenderse el gobierno de Isabel contra el golpe de estado de ambas superpotencias. Así en el número 29 de esta revista llegaba a su fin el trabajo conjunto de VC y el PCR, por la abismal diferencia que ahora separaba ambas organizaciones que consideraban enemigos fundamentales a superpotencias distintas. (19) Ver NT n° 166, del 20-08-75 “¿Cómo impedir el golpe de estado?”, necesidad de enfrentar el golpe: parar, ocupar y lucha, solo el pueblo movilizado, organizado y armado puede impedir el golpe; NT n° 168, del 17-09-75: “Así se prepara el golpe. Los pronunciamientos militares y el pronunciamiento popular”; NT n° 172 cit. “Escupiendo al cielo”, art. cit. Contra dicha ofensiva –el proyecto militar proyanqui- hay que alzarse en huelga para prepararse contra el golpe; “El proletariado marca la huella”, ejemplo de obreros de Smata Córdoba y Rigolleau que votaron paro indeterminado en caso de golpe:parar, ocupar y luchar. NT n° 175 cit., “Alerta ensayó su golpe el fascismo” “Comunicados de VC contra el golpe” “La lección del 16-09-1955 para que no haya otro setiembre”; NT n° 183, del 12-04-76: “Córdoba bajo la bota de Menéndez”, rescata abandono de tareas y asambleas en Smata y el volante partidario contra el golpe. Ver P. Liberación, CC, “Argentina: experiencias del PL en la lucha contra la dictadura fascista y la posterior democracia burguesa”, 14-03-2000, pag.1.
(20) Ver NT n° 183 cit.: “Muera la dictadura: quieren prohibir lo imposible de prohibir”; “La dictadura será vencida” reiterando el carácter terrorista de la dictadura y la continuidad del proceso de fascistización de las clases dominantes; “Los objetivos de la Junta Subversiva”, “Organizar la resistencia”, “Falso PC con el golpe contra el pueblo”, transcribe declaración del PCA del 25-04-76 donde saluda a la Junta para la transición; “Organizar la resistencia” haciendo eje en la resistencia sindical. No Transar era ahora órgano del Partido Comunista (marxista-leninista) –PC ml- nombre que reemplazó al de Vanguardia Comunista por resolución del II Congreso Nacional “Raúl Kossoy-Ana María Estevao” que se llevara a cabo entre febrero y marzo de 1976. No obstante ello, debido a la identificación general con el nombre que acompañó al partido por más de diez años, la continuidad de la misma prensa y la falta de difusión de su nueva denominación, hizo que mantengamos para el período analizado -1965-1978-, la que era históricamente conocida; NT, n° 186, del 14-07-76: “Sin derrotismo ni aventurerismo, unir, organizar, movilizar!”; “Desconocen, pisotean, destruyen los derechos humanos”; NT, n° 190, del 10-11-76: “Preparemos un paro general”; “Por los patriotas presos”; NT n° 188, del 8-9-1976: “Organizaciones de masas: pilar de la resistencia”; “Organizar la defensa de los derechos humanos”, “La dictadura mientras reprime ferozmente con hipocresía habla de democracia” desenmascarar maniobras hipócritas dictadura, “Aislamiento de la dictadura” por Movimiento Internacional de Juristas Católicos y Federación Internacional de Derechos Humanos, Onu, Solicitada de la socialdemocracia y del Parlamento Europeo; NT n°193, del 09-02-77: “Seguir los pasos de Luz y Fuerza”; “Ante la barbarie fascista, luchar por la libertad”, denunciar el accionar dictatorial por todos los medios, la solidaridad y movilización por los presos, llamado a la solidaridad internacional. Por esta política ante la dictadura y las diferencias a nivel internacional, la única exclusión que se hacía en el llamado unitario era al PCA. La equivocada postura anti-URSS llevó a considerar a la Armada Argentina como posible defensora de la soberanía argentina ante los barcos pesqueros ilegales rusos y a que se repudiara el atentado contra el almirante Lambruschini., dos actitudes negativas de este período. Ver NT n° 204 del 11-01-78 y NT n° 211, del 9-8-78.
(21) Ver NT n° 190 cit.: “Preparemos un paro general”, reivindica el ejemplo de Luz y Fuerza de Bs.As. en solidaridad con los desaparecidos, “La resistencia popular vencerá”, describe la huelga de Luz y Fuerza, el pasaje a la lucha democrática y la aparición de los tres delegados secuestrados del gremio. NT n° 204 cit.: “1978: crecerá la resistencia” contra la dictadura más sanguinaria de la historia argentina; “Balance de un año: opresión y lucha”, defiende la caracterización de la dictadura como fascista y vendepatria y el camino de la lucha popular para derrotarla; resalta como logros la liberación de secuestrados como Alfredo Bravo, Secretario General de Ctera (docentes).
(22) Ver NT n° 188 cit.: “Organizar la defensa de los derechos humanos”, resistir, colectas, pronunciamientos, actividades colectivas en fábricas o barrios, organizar comités de derechos humanos, difundir nombres y circunstancias por los medios de prensa, hacer publicación; NT n° 192, del 12-01-77: “La dictadura atraviesa momentos difíciles”: organizar y extender el movimiento de derechos humanos, hacer campañas más enérgicas para rescatar nuevos compañeros; NT n° 203, del 14-12-77 “Nueva Represión”: denuncia los secuestros de la Iglesia Santa Cruz en reunión de familiares de desaparecidos; NT n°204 cit.: “Amplia indignación por los secuestros” de la Iglesia Santa Cruz; NT n°208, del 10-05-78: “La lucha por la libertad” después del zarpazo dictatorial en la Iglesia de Santa Cruz, el movimiento familiares y desaparecidos continúa. Ver PL, “Argentina: Experiencias del PL en la lucha contra la dictadura fascista cit.”, pag.3. UKI, Goñi, en Judas. La verdadera historia de Astiz, Ed. Sudamericana, Bs.As., 1996, aporta elementos valiosos de las vidas de estos compañeros y demás patriotas secuestrados y asesinados. Describe la valiente actitud del querido “Cabezón” Cristina de no irse del país, aún cuando no acierta con sus comentarios sobre la línea partidaria, lo que refuerza la necesidad de este trabajo dando voz a los camaradas que carecen de esa posibilidad. BOUSQUET, Jean Pierre, en Las locas de Plaza de Mayo, Ed. El Cid., Bs.As., 7° Ed.1984, detalla el accionar de las madres y transcribe el testimonio de Cecilia Vázquez quien era militante de VC y junto con Maria Lidia de Elbert, denunciaron estos secuestros el 16-12-77 en forma pública en la Plaza de Mayo. No acierta al confundir a Horacio Aníbal Elbert como militante católico, p.147. Ver CONADEP, Nunca Más cit., pp.135/6, 339/340, 351/2 y 448. Ver OEA, Informe sobre la situación de los DDHH en Argentina, “El informe prohibido”, Oea/Cels, Bs.As., 1984, p. 256. Ver fallo contra las Juntas Militares de la Cámara Nacional de Apelaciones en lo Criminal y Correccional de la Capital Federal del 9-12-85, que fuera confirmado por la Exma. Corte Suprema de Justicia de la Nación, que puede consultarse en Fallos CSJN, Tomo 309, Vol I., donde consta la referencia a lo ocurrido en la Iglesia Santa Cruz -pp.153 258- y los secuestros de los compañeros Horacio A. Elbert -Caso N°210-, Angela Auad –Caso 212-, Eduardo Gabriel Horane –Caso 215-, Patricia Oviedo -Caso 217-, (pp. 783/4, 789/91, 795/8, 802/4, respectivamente), junto con los demás desaparecidos en esos hechos.
(23) Ver NT n° 190 cit.: “Por los patriotas presos”; NT n° 202 cit.: “La resistencia obrera llega a una nueva altura” octubre: primera manifestación madres desaparecidos en Plaza Congreso. “La Marcha de las Madres”: comenzó con encuentros semanales en Plaza de Mayo, luego comisión de madres de desaparecidos y solicitada en La Prensa; petitorio a la Junta militar de la LADH. En Plaza Congreso 700 personas cercadas por la policía 250 detenidos luego liberados; NT n° 203 cit.: “En defensa de la libertad y del derecho a la vida”: reivindica el accionar del embrión de las Madres de Plaza de Mayo y la lucha democrática que ayuda y se relaciona con el resto de las reivindicaciones; NT n°204 cit.: “1978: crecerá la resistencia”: unir la lucha democrática con el reclamo social, movimiento juvenil y democrático de familiares secuestrados y detenidos políticos también con el PCA (quizás la única vez que no se excluyó a este partido providelista), “Amplia indignación por los secuestros” de la Iglesia Santa Cruz, convoca a frente por las libertades democráticas sin el PCA, llamando a los familiares, vanguardia de esta lucha, a mejorar la organización y el sentido de la oportunidad para producir acciones; NT n°208, cit.: “Reclamo de Madres en Plaza de Mayo”; NT n° 209, del 14-06-78: “En torno al mundial”, dos periodistas alemanes comentaron de las Madres de Plaza de Mayo. “Notas Políticas”: resalta solicitada en diario La Prensa de los organismos de derechos humanos, intento del PCA de sabotear la inclusión de los nombres de VC. ”Gran acción de familiares”: madres con pañuelos blancos en Plaza de Mayo marcha de 200 personas con cartelitos y fotos de desaparecidos, luego represión de la marcha por la calle Florida. Ver PL, “Argentina: Experiencias del PL en la lucha contra la dictadura fascista cit.”, p.3.; UKI, Goñi, ob.cit., p.146.
(24) Ver NT n° 183, cit.: “Los objetivos de la Junta Subversiva”; NT n°193 cit.: “Denuncia. Desaparición de Carlos Ernesto Patrignani, asesor letrado del Sindicado del Ingenio Ledesma, y de Jorge Weisz. Ver CC del PL, “Experiencias cit.”, p.4. Un film realizado por el documentalista rosarino Fernando Krichmar sobre un guión del salteño Agustín Fernández, editado por el Grupo de Cine Insurgente, llamado “Diablo, Familia y Propiedad, historia de crímenes del Ingenio Ledesma” da cuenta de estos episodios. Sergio Ortiz hizo un aporte crítico sobre el mismo, en “Análisis político de un interesante video”, PL, 25-09-1999. Jorge O. Weisz, estudiante de 5° año de
Ingeniería en Buenos Aires, dejó sus estudios y fue como electricista al ingenio Ledesma, ver PL, CC, “Breve historia del PL cit.”, p.3. Zapata, Diego: “Aprender del ejemplo revolucionario de Roberto Luis Cristina”, Bs.As., 18-08-86 y “Reportaje a Antonia Cristina”, Bs.As., 22-07-86. Ver CONADEP, Nunca Más cit., pp.431/3
(25) Ver NT n°185, del 9-6-76: ”No nos doblegarán”: denuncian detención de Pedro Guillermo Rubio en Tucumán por personal de la V Brigada y comunicado policial de que con el ex senador Vargas Aignasse ¡fue secuestrado de un celular policial!. VC resuelve reincorporar a Rubio, quien estaba alejado del partido por una crisis ideológica personal.
(26) Ver NT n° 186 cit.: Secuestro de Ana M.Conti Mattei en Olivos; NT n°203, cit.: “Censura”, refiere represión contra los periodistas, entre ellos Raúl Celso D’Atri, director del diario “La Arena” de la Pcia. de La Pampa, de José Estevao del periódico “La Voz de Solano” detenido desde 1976 y de su director Santiago Servin, desaparecido. “Que aparezcan con vida”.
(27) Ver NT n° 209 cit.: “La verdadera campaña contra el país”: el pueblo argentino debe agradecer las manifestaciones de solidaridad que recibe, el esfuerzo de la prensa extranjera. La dictadura posa de patriota ante campaña de derechos humanos del Presidente norteamericano Carter que tiene consecuencias positivas con aislamiento de la dictadura; NT n° 208, cit.: “La lucha por la libertad”: redoblar denuncia desenmascarar, concitar la solidaridad internacional; NT n° 211, del 9-8-78: “EEUU y la dictadura, confrontación Carter/ Junta Militar por los derechos humanos”: no comparte la sanción yanqui de no aprobar créditos por ser una pena colonial; “Lucha por la libertad”:plantea un frente de fuerzas democráticas; NT n° 198, 13-07-77: “Fracaso de la dictadura”: en OEA resolución a iniciativa de EEUU por los derechos humanos. Propone tomarle la palabra a Carter, impulsar la lucha antidictatorial sin olvidar que el imperialismo norteamericano es el principal enemigo.
(28) Ver NT n°198 cit.: “A diez años”: reivindica campaña de movilización ideológica de 1967. En 1977 plantea que la contradicción a vencer es la campaña represiva y la tarea de preservar y consolidar el Partido; NT n° 211 cit.: “Nueva represión contra los comunistas”, denunciando los secuestros en Capital Federal de los compañeros Jorge Watts, Mauricio Poltarak y Guillermo Moralli antes del 1°-08-78 y de Marcos Chueque, en Mar del Plata, el 27-06-78.
(29) Este aspecto está relatado en Uki Goñi, Judas, la verdadera historia cit., pp.178/9. La salida al exterior de algunos dirigentes no arrojó resultados positivos salvo en el grupo de España, ver PL, “Breve historia del PL”, cit. pp.9/10
(30) Ver PL, “Breve historia…”cit., p.9; PL, “Argentina: experiencias del PL en lucha contra la dictadura fascista.”.cit.”, pp.4/7.
(31)
Ver CONADEP, “Nunca Mas” cit. (p.50/1 y testimonio de Guillermo Horacio Dascal,
p.56/7); Sentencia contra las Juntas Militares, Fallos CSJN, Tomo 309, Volumen
2, casos de Omar Jorge y Juan Farías, Hugo Pascual
Luciani, Juan Carlos Benítez y Javier Antonio Casaretto (pp. 1070/3, 1089/92 y 1101/5, respectivamente).
(32) Ver WATTS, Jorge y otros, “Formulan denuncia, solicitan medidas en causa “Privación Ilegítima de la libertad de Paulino Alberto Guarido y otros” y “Manifiestan, solicitan medidas”, donde se aportaron elementos probatorios y análisis de las responsabilidades de militares y personal de seguridad, en una de las causas judiciales abiertas por los crímenes de El Vesubio, en presentaciones efectuadas junto con los familiares del grupo de los diecinueve compañeros antes mencionados. Ver diario Clarín, 10-12-83. CELS, Un caso judicial revelador, colección Memoria y Juicio, que se refiere específicamente al caso de VC y El Vesubio. La primera de las causas judiciales por estos crímenes se caratuló “Beatriz PEROSIO y otros s/privación ilegítima de la libertad”, N°15807 y se tramitó por ante el Juzgado Criminal de Instrucción N°19, a cargo del Dr. Caminos, Secretaría Ricotta Denbeg y fue impulsada por el CELS; CONADEP, Nunca Más cit., p.176/8; PL, “Argentina: experiencias en la lucha contra la dictadura fascista…cit.”, p.8/9; “El Diario del Juicio”, que se editara en relación al juicio seguido a las Juntas de Comandantes en Jefe y que complementa la sentencia judicial por contener mayor información con reportajes a sobrevivientes y testigos que no son citados con amplitud en aquella, Año I, N° 7, 9 de julio de 1985, Ed.Perfil, Bs.As.: “Tuve el privilegio de sobrevivir a El Vesubio”, testimonio de Jorge Federico Watts de Ate y el PC (ml); N° 14, del 27-08-85, testimonio de J.F.Watts y Susana Laxague; N°15, del 8-9-85 (comprende audiencias del 3 al 5-07-85), testimonios de Estrella Iglesias- pag.328-, y de Rubén Darío Martínez –pag.331-. Ver Sentencia contra las Juntas Militares de la Cámara Nacional de Apelaciones en lo Criminal y Correccional de la Capital Federal del 9-12-85, cit., en Fallos CSJN, Tomo 309, Vol I., donde constan los testimonios y denuncias de los cros. del Partido en pp.113/115, 119, 124, 126, 132/138, 141/2, 145/6, 148/9, 153, 157, aportando al descubrimiento del campo “El Vesubio”: pp.190/2, 199/202, 207, 213/5, 217, 225, 238, 240, 258, 265, 267/9, y estando incorporados como casos de secuestro y desapariciones de la acusación y condena, además de los mencionados en la nota 22, los cros. Roberto Luis Cristina -Caso 156-, Rubén Bernardo Kriscautzky -Caso 155-, María Angélica Pérez de Micflick-Caso 157-, Estrella Iglesias Espasadín -Caso 158-, Jorge Federico Watts –Caso 159- y Enrique Jorge Varrin –357- (pp.644/663 y 1018/21, respectivamente). Además de los siguientes: Cecilia Vazquez de Lutzky -Caso N°361-, Esther Gersberg de Díaz Salazar -Caso N°362-, Luis Miguel Díaz Salazar -Caso N°363-, Osvaldo Luis Russo -Caso N°365-, Horacio Hugo Russo -Caso N° 366-, Roberto Oscar Arrigo -Caso N° 367-, Rolando Alberto Zanzi Vigoroux -Caso N°368-, Darío Emilio Machado – Caso N° 369-, Hugo Vaisman -Caso N°370-, Jorge Rodolfo Montero -Caso N° 371-, Guillermo Alberto Lorusso -Caso N°372-, Raúl Eduardo Contreras -Caso N°373-, Ricardo Daniel Weschenberg -Caso N°385-, Faustino José Carlos Fernández -Caso N°405-, Jorge Osvaldo Weisz – Caso 414- y Francisco José Elena -Caso N°430- (pp.1034/1070, 1086/9, 1121/4, 1138/40 y 1278/80, respectivamente, Fallos CSJN, Tomo 309, Vol.2; CONADEP, Nunca Mas, cit., pag.332/3). Para el detalle de las condenas ver pp.1611/ 1612, 1615 y 1627. Además, se rechazó el pedido de la defensa de Viola de la prescripción de la acción penal en los casos de los militantes Vázquez (N° 361), Díaz Salazar Figueroa (casos N°363 y 364) y Contreras (Caso N° 373) (ibid, p.1627).
(33) Ver testimonio de Roberto Oscar Arrigo, Legajo Conadep WR 43. Sobre estos aspectos pueden consultarse: SOTO, Américo:“Tortura, resistencia y desinformación”, “Víctor Hugo Paciaroni, te están nombrando” y “Beatriz Perosio camarada presidente de APBA y FAPRA”, en www.pl.org.ar y en este libro, los dos últimos. Ver CONADEP, Nunca Más cit., pp.431/3, 436, 440 y 441. Ver periódico “El Diario del Juicio”, cit., N° 19, del 1-10-85, versión completa de la acusación contra las Juntas, sobre “El Vesubio”, pp.22/4; N° 20, del 8-10-85, sobre el grupo de la Iglesia Santa Cruz, acusación de la Fiscalía, p.20; N° 33, del 7-1-86, La Sentencia de la Cámara Federal en contra de las Juntas incorpora como víctimas de privación ilegítima de la libertad a los compañeros desaparecidos y secuestrados del Vesubio, pp.13, 17/8 y 26. Además cita en sus fundamentos a las declaraciones en las audiencias de los testigos y que fueran camaradas de VC: Jorge F.Watts, Guillermo A. Lorusso, Estrella Iglesias Esposadin, Faustino José Fernandez, Juan Antonio Frega, Raúl E. Contreras, Darío E. Machado, Cecilia Vazquez de Lutzky y María Angélica Pérez de Micflick, y a los familiares Marina Kriscautzky y Susana Laxague; N°34, del 14-01-86 se refiere a testimonios de compañeros (pp. 1/3 y 10/11), y al caso de la Iglesia Santa Cruz, p.9; N°35, del 21-01-86, refiere el caso 159 de Jorge Federico Watts, pp.11/2. Entrevista con Jorge F.Watts, Bs.As., 5-1-98.
(34) Ver PL, “Experiencias del PL en lucha contra la dictadura fascista…” cit., pp.4/7. En la película “La Batalla de Argelia” hay un ejemplo de ello cuando a los aspirantes se los pone en el brete de enfrentar y apuntar a un militar francés, con lo que se mataban varios pájaros de un tiro, ya que si era un infiltrado difícilmente se animara a tamaño desafío y en caso contrario, su reacción y actitud servía para el recorrido debido para su incorporación al Frente de Liberación Nacional.
(35) Ver NT n°212, del 9-8-1979: “El partido no se rinde”.
(36) Tal como plantean En Memorias del Calabozo cit., Mauricio Rosencof y Eleuterio Fernández Huidobro.